Familias de Ometepe realizan caminata contra el terrorismo golpista

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Ni la lluvia detuvo a familias del municipio de Altagracia en la Isla de Ometepe, para que se manifestaran exigiendo justicia para las víctimas que fueron asesinadas por grupos terroristas que por más de 2 meses sembraron el terror entre el pueblo nicaragüense.

"Los que mueren por la vida no se pueden llamar muertos", gritaban las personas quienes recorrieron la calle principal del municipio de Altagracia, bajo la refrescante lluvia que no impidió que se manifestaran a favor de la justicia para los hermanos que fueron asesinados por estos grupos vandálicos financiados por organizaciones golpistas, quienes ejecutaron el golpe suave, no dando efecto pues el pueblo respaldó unánimemente al Gobierno Sandinista.

Las familias también pidieron la paz para Nicaragua, justicia no solo para los asesinados, sino también para los militantes que fueron torturados, denigrados y humillados únicamente por ser leales y con principios revolucionarios, fieles al Frente Sandinista de Liberación  Nacional.

"Intentaron dar un golpe de Estado aquí en Nicaragua, pero el pueblo respondió porque estamos defendiendo la paz", mencionó Rufino Bermúdez, quien exige justicia.

Caminata "Justicia para las Víctimas del Terrorismo" en Nandaime

"estamos pidiendo justicia porque eso no puede continuar así, únicamente por ser Sandinista no están atacando y matando, incluso hasta los Policías han muerto, los han quemado solamente por guardar el orden en esta Nicaragua que vivía en una eterna paz", dijo Néstor Rosales, quien también exige justicia.

Las familias también destacaron la paz y tranquilidad en la que el país vivió por más de 11 años, lo que atrajo a grandes inversionistas quienes depositaron su confianza en este país para invertir, también mencionaron el crecimiento turístico que tuvo nicaragua posicionándose entre los mejores lugares de destinos turísticos para vacacionar, sin embargo, todo esto fue arrebatado por las ambiciones de poder de personas que no obedecen al verdadero sentir del pueblo, sino a sus propios intereses mezquinos.