Rezos, recuerdos y clamor de justicia durante entierro de Camila

el salvador

La tragedia de Camila unió a muchos. Vecinos, iglesias, padres de familia, empleados de la alcaldía, y sobre todo, a la comunidad educativa del Centro Escolar Católico Corazón de María. Todos la despidieron durante un emotivo entierro este jueves por la tarde en el cementerio Jardines del Recuerdo.

Camila fue despedida con una misa, aplausos, rezos, recuerdos de su alegría, pero su familia aún recalca la irresponsabilidad de parte de las autoridades de la escuela sen permitir el acceso a los niños a una rueda de una altura inapropiada para ellos. La familia sostiene que la Chicago de la que cayó Camila no era adecuada para niños, solo para adultos.

Camila murió el pasado martes cuando cayó de ese juego mecánico al interior de su escuela, durante un receso.

Más de 350 personas acompañaron a Javier Salguero, el padre de la víctima, quien crió a su hija solo, ya que la madre murió cuando la niña apenas tenía 3 meses de edad.

 

Camila ya está en el cielo con su madre. No se preocupen, no lloren, se fue alegre porque acá en la Tierra lo era”, expresó una mujer visiblemente apesadumbrada durante el sepelio de la niña.

Familiares de Camila señalan una negligencia

Una llamada telefónica que recibió Javier Salguero el martes, a las 11:10 de la mañana, le cambió la vida. Una amiga, quien es madre de una compañera de estudios de su hija Camila, de 8 años, lo alertó de que la niña había sufrido un “accidente grave” y le aconsejó que llegara rápido a la escuela Corazón de María, en la colonia Escalón.

Lo poco que le pudo decir la señora es que la menor de edad se había caído junto con otra niña de una Chicago, el juego mecánico que fue instalado el fin de semana para celebrar una actividad deportiva.

El padre de Camila, quien es albañil, estaba en ese momento en su trabajo y tuvo que llamarle a sus hermanos para que se adelantaran a ver qué había pasado con su hija.