Cómo manejar una relación liberal

Para muchos las relaciones liberales suenan a locura e inestabilidad, mientras que para otros son la solución perfecta para reducir los conflictos y aprender el arte de dar espacio a la pareja.

Ciertamente muchos piensan que el hecho de vivir en pareja te obliga a pertenecer a esa persona, obviando que seguimos siendo nosotros mismos aunque estemos en una relación. Pero ¿es posible avanzar con una relación liberal? Pues depende. En unComo.com te damos algunos consejos para que descubras cómo manejar una relación liberal sin morir en el intento.

Instrucciones

Las relaciones liberales son aquellas en las que la pareja no se siente atada, teniendo la libertad para salir con sus amigos, disfrutar de reuniones sociales y realizar cosas con absoluta libertad y sin tener que consultar a su pareja. Solo en algunos casos las relaciones liberales pueden incluir también frecuentar a otras personas, aunque no siempre es lo habitual

Primero que nada debes saber que las relaciones liberales no son para todo el mundo. Si eres alguien dependiente emocionalmente de tu pareja, celoso o inseguro no vale la pena siquiera que intentes mantener una relación liberal pues ésto te desgastará y afectará emocionalmente de forma importante.

Asume que no es para ti, convérsalo con tu pareja y si no llegan a un acuerdo piensa seriamente en el rumbo de la relación, pues el resultado no será positivo.
La primera clave para manejar una relación liberal es la comunicación.

Existen muchos tipos de relaciones liberales ¿cuál es la suya?. Establecer los límites es muy importante para que ambos estén claros.

Hay parejas establecidas de manera formal que simplemente viven su vida social sin tantas ataduras, saliendo con sus amigos, compartiendo con su entorno sin la necesidad de estar siempre juntos. Hay otras en las que, además de esto, no hay ningún compromiso de fidelidad.
Sea cuál sea el caso, ambos deben saber dónde están metidos y cuáles son los límites.

Si has decidido mantener una relación liberal, los celos y las inseguridades no tienen cabida. Es importante confiar en la pareja y entender que mayor libertad no necesariamente implica más libertinaje. Una vez que han definido los códigos de la relación, ambos deben estar claros de cuál es el panorama, por lo que no queda más que confiar.

Manejar una relación liberal de forma exitosa implica saber dar espacio a la pareja. Espacio para que viva como desee, espacio para que tenga su vida social al margen de la relación si lo quiere, espacio para que se ahorre explicaciones cuando lo crea necesario.

Es importante entender que no todo el mundo puede manejar esta situación, por lo que hay que estar dispuestos a ceder, negociar y entender.
La relaciones liberales se caracterizan justamente por la libertad que hay en la pareja, por lo que es muy importante que ninguno de los dos se sienta atrapado. Aprender a dar libertad es fundamental en este tipo de uniones.

Trabaja también en la comunicación sexual y en la química, para hacer que la conexión en el plano íntimo sea potente e intensa. Ésta es una buena forma de mantenerte cerca de tu pareja y crear una relación sólida más allá de los convencionalismos sociales.

Todos estos consejos para mantener una relación liberal merecen la pena de ser aplicados cuando realmente existe una unión sólida en la pareja. Pero, si más que una relación liberal se trata de algo casual o de un «rollito» temporal, este tipo de relaciones deben ser manejadas de otra forma.