10 consejos de madres que deberíamos escuchar

Qué difícil es a veces hacerle caso a nuestra madre. No es un tema de la edad; podemos tener cincuenta años y no querer escucharla. Sin embargo, existe un sentimiento que se da siempre: el de ver después que tu madre tenía razón. Los consejos de madre están, en cierta forma, en su código genético, y son el modo que tiene la persona que más nos conoce en el mundo para protegernos.

Consejos de madres que deberíamos seguir

No es el fin del mundo

Probablemente nuestras madres vivieron más situaciones lamentables que nosotros. No solo debemos seguir este consejo, sino saber apreciar cómo nuestra madre salió adelante en los malos momentos de la vida, poniendo fin a las situaciones y resolviendo todo de la mejor manera posible.

Ámate a ti mismo

Para estar bien con los demás, primero tenemos que estar bien con nosotros mismos. No debemos dejar que nada ni nadie nos haga sentir mal, si aceptamos malos tratos, los seguiremos recibiendo. Este consejo está íntimamente relacionado con el de «podemos si pensamos que podemos», que mi madre muy a menudo me decía.

No presentarse con las manos vacías

Este es un consejo que me sigue hasta el día de hoy, no por el consejo en sí sino porque a mi madre nunca le parecía suficiente. Pero es cierto que, si te invitan a una casa, queda muy feo llegar con las manos vacías. No importa qué sea lo que llevemos, lo importante es la intención.

Siempre ser independiente

Es algo que las madres dicen principalmente a sus hijas. Ser independiente y autosuficiente es, en cierta medida, la clave para una madre para saber que educó bien a sus hijos.

Obtener una educación

A veces nos parece inútil o aburrido estudiar, más aún si tenemos la oportunidad de tener un buen trabajo sin esfuerzo. Pero lo cierto es que la educación, desde todos los puntos de vista y no únicamente el lectivo, es necesaria para el desarrollo de nuestra personalidad.

La educación básica y obligatoria, el desarrollo de una carrera, profesión u oficio que nos guste, pero además el saber de otras cosas nos hará crecer. Nunca se sabe demasiado, al contrario, mientras más sabemos más podemos manejarnos por la vida.

Es mejor estar solo que mal acompañado

Esta idea la recibí, de diferentes formas, muchas veces por parte de mi madre. Ante un desengaño amoroso, ella me recordó siempre que el hombre correcto ya llegaría, y que mientras era mejor la soltería.

No es lo que dices, sino cómo lo dices

A veces hablaba de más, decía cosas que podían herir a la gente. Esto nos pasa a todos, en mayor o menos medida. Lo cierto es que a veces hay que tener en cuenta cómo decir las cosas, y no tanto qué decimos.

Sonríe

La vida es bella, hay que sonreír más y llorar menos. Probablemente, uno de los mejores consejos de mi madre.

Usa ropa interior limpia/mantente depilada

Siempre me causó gracia este consejo, hasta que tuve un accidente y un joven doctor vio mis piernas peludas. Es cierto que no debemos pensar que nos pasará algo malo, pero este y otros son buenos consejos a tener en cuenta por si tenemos un imprevisto -tener el ICE en el celular, el número de nuestro seguro de salud, las alergias, etcétera-.

Abrigarse el cuello

Tal vez uno de los consejos menos emotivos de la serie, pero que, sin embargo, todas las madres dicen. Incluso puede parecernos una obsesión, pero lo cierto es que el cuello es muy sensible al frío, y consigue enfermarnos rápidamente.