Artiom Vasiúnik, con tan solo 13 años, creó a «Autoliot» un auto, especie de bicóptero biplaza con alas, capaz de andar tanto por tierra como por aire.
El niño ruso contó con la ayuda de su profesor de matemáticas para desarrollar un programa de diseño en 3D, el que fue presentado en el Departamento de Enseñanza de Moscú durante una conferencia dedicada a los cambios que producen las innovaciones informáticas en la vida escolar
Autoliot, que su nombre está inspirado en la palabra «samaliot» que significa avión en ruso, puede alcanzar una velocidad de 170 kilómetros por hora en carretera y volar a alturas de hasta 200 metros.
La particularidad de esta nave es que no necesita una pista para poder despegar, sino que levanta vuelo en posición vertical.
