Pastor David Spencer agradece condecoración que le entregará el Gobierno

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Muy emocionado y contento, se encuentra el misionero estadounidense, David Spencer, luego de conocer que próximamente el Gobierno de Nicaragua le entregará la Orden de la Independencia Cultural, ¨Rubén Darío¨ y le concederán la ciudadanía nicaragüense.

"El día 19 de febrero, la primera dama y vicepresidenta de nuestra amada Nicaragua, la señora Rosario Murillo, anunció en un comunicado que se me estarán otorgando la ciudadanía nicaragüense y además la Orden de la Independencia Cultural, Rubén Darío, lo cual para mí fue motivo de muchísimo gozo, una alegría que mis palabras no lo pueden expresar. Mi esposa, Bonnie y yo amamos a Nicaragua y al nicaragüense, son gente linda y preciosa de las cuales mi corazón se ha enamorado y mi amor por los nicaragüenses lo tengo metido en mi corazón", expresó Spencer.

Para este líder religioso, es un gran honor ser condecorado y más aún llamarse nicaragüense de corazón y ahora de manera legal.

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"Hoy me presento delante de ustedes, y delante de toda la nación de Nicaragua para decirles que para mí será el mayor privilegio de toda la vida, yo agradezco a Dios porque es él quien está concediendo las peticiones de mi corazón, y sí acepto este gran honor que se me estará dando, pero no para vana gloria mía, sino para la gloria de nuestro Dios", puntualizó.

"Estoy aquí muy conmovida, porque esto es algo que mi esposo ha deseado por tanto tiempo, y ver eso es algo tan increíble para él y para mí", mantuvo Bonnie Spencer, esposa del pastor.

El reconocido pastor, tiene 46 años en el país, los cuales han sido suficiente para dejar huellas espirituales, pero también materiales en el pueblo nicaragüense.

La Iglesia Hosanna fue fundada por este pastor en 1994, logrando crecer en 9 departamentos con 15 iglesias. Su reconocimiento se debe a su constante servicio espiritual,  predicando la palabra Dios. Hace unos meses hizo público que padece una enfermedad letal, que aunque quebrante su cuerpo, su alma está llena de paz y fe, esperando la voluntad de Dios.