Corea del Sur reflotará ferry hundido en 2014

Las operaciones para reflotar el ferry surcoreano "Sewol" empezaron el miércoles, casi tres años después del dramático naufragio en el que murieron 304 personas, en su gran mayoría estudiantes.

El "Sewol" transportaba a 476 personas cuando naufragó frente a la isla de Jindo, en el sudoeste de Corea del Sur el 16 de abril de 2014. 

El navío se encuentra a más de 40 metros de profundidad. Las operaciones para reflotarlo previstas el año pasado fueron pospuestas en varias ocasiones y las autoridades temen que el buque de 145 metros de eslora se parta en varios fragmentos durante la operación.

Volver a poner a flote el ferry es una reivindicación esencial de las familias de las víctimas. Nueve cuerpos nunca fueron hallados y podrían encontrarse entre los restos del buque.

Devastados, los padres de las víctimas pedían a los habitantes que rezaran para que la operación saliera bien.

"Soy una madre que echa realmente de menos a su hija", declaró entre llantos Lee Keum-Hui. "Rezad por nosotros para que volvamos a casa con Eun-Hwa".

Lee, como otros miembros de las familias de las víctimas, vive desde el naufragio en cabañas en Paengmok, el puerto más cercano.

El drama fue causado principalmente por errores humanos: un espacio de carga ilegalmente rediseñado y en sobrecarga, una tripulación inexperimentada y relaciones complicadas entre el operador y las autoridades de regulación.

El capitán del ferry Lee Jun-Seok fue condenado a cadena perpetua por "homicidio por negligencia" y 14 miembros de la tripulación fueron condenados a penas de entre dos y 12 años de cárcel.

En un ambiente tenso, el padre de un desaparecido intentaba atisbar con unos prismáticos las operaciones. "No levantaremos el campamento ni cuando el 'Sewol' haya sido sacado a flote", dijo, requiriendo el anonimato. "No sabemos lo que encontrarán bajo la nave".

Unos 50 allegados de las víctimas zarparon al mar para seguir las operaciones de cerca, explicó.

Dos enormes embarcaciones se colocaron a ambos lados del ferry de 6.825 toneladas. Las operaciones, dirigidas por un consorcio chino, implican el uso de air bags, vigas y cables. 

Cuando dos tercios del navío salgan a la superficie, una estructura semisumergible se colocará debajo para elevarlo totalmente y poderlo transportar hasta el puerto de Mokpo, donde se llevarán a cabo las investigaciones sobre los desaparecidos.

Según un responsable del ministerio de Asuntos Marítimos, fueron necesarias tres horas para alzar los restos un metro del fondo del mar. 

Después de estas pruebas, el ministerio anunció su decisión de avanzar en la operación, que está previsto que dure tres días.

El naufragio ocurrió bajo la presidencia de Park Geun-hye, recientemente destituida salpicada por un escándalo de corrupción. 

Durante las primeras horas de la tragedia, cruciales, la entonces mandataria se quedó recluida en su residencia. Nunca explicó la razón de su encierro, lo que generó innumerables especulaciones, desde que tenía una cita amorosa hasta que se hizo una operación de cirugía estética.