Campesino estudió leyes 16 años para demandar a una empresa

Un hombre de 60 años, nacido en un campo de la ciudad china de Qiqiharpor, consiguió demandar y ganarle un juicio a la compañía que vertió tóxicos en su plantación y las de sus vecinos. El sexagenario logró la hazaña pagándole con maíz a un librero de la zona.

Wang Enlin, un granjero de 60 años, estudió leyes de forma autodidacta durante 16 años para presentar una demanda contra una corporación estatal que contaminó con vertidos químicos sus terrenos cerca de la ciudad de Qiqihar, en el noreste de China, informa el diario británico The Daily Mail‘ citando fuentes locales.

Wang, que tiene unos 60 años y solo fue a la escuela tres años, asegura que en 2001 estaba jugando a las cartas con sus vecinos cuando unos vertidos de la planta de cloruro de polivinilo, perteneciente de la corporación estatal Qihua Group, inundaron la casa en la que se encontraban y su parcela.

El derrame tóxico impidió a los agricultores locales cosechar sus cultivos durante varios años, e hizo que Wang se decidiera a luchar por el medio ambiente y por el futuro de sus vecinos.

El hombre presentó una denuncia ante las autoridades locales, pero cuando le pidieron que presentara pruebas legales de la contaminación, Wang entendió que necesitaba una base jurídica para su demanda. “Sabía que tenía razón, pero no sabía qué ley ha infringido la otra parte ni como conseguir las pruebas”, aseguró el hombre. Como no tenía dinero para comprar libros, Wang pagaba con sacos de maíz a una librería para que le dejaran consultar sus libros y copiar a mano la información jurídica que necesitaba.

A pesar de las dificultades y pese a que las cortes locales retrasaron el proceso durante años, Wang logró finalmente presentar su demanda en 2015. La corte del distrito Angangxi falló en contra de Qihua Group, dictaminando una indemnización de 120.000 dólares para Wang y sus vecinos. De ese modo el granjero ganó su primera batalla legal contra la corporación. Sin embargo, la empresa está preparando un recurso y Wang y sus vecinos tendrán que seguir con su lucha.

Fuente: Cronica.ar