Francia: Detienen a 9 en cacería de sospechosos

Temerosos pero desafiantes, los franceses guardaron el jueves un día de luto por las 12 personas asesinadas en una publicación satírica parisina, mientras la policía buscaba afanosamente a dos hermanos fuertemente armados sospechosos en la masacre y que se teme puedan volver a atacar.

Los dos sospechosos —uno de ellos un ex repartidor de pizzas que fue condenado por un cargo de terrorismo— deben considerarse «armados y peligrosos», dijo la policía en un boletín. Noventa personas han sido interrogadas hasta el momento en la investigación y nueve cercanas a los dos sospechosos —Cherif Kouachi, de 32 años, y su hermano Said Kouachi de 34— fueron detenidos para interrogarlos en más detalle, dijeron funcionarios.

Las autoridades ampliaron la alerta de terrorismo máxima de París a la zona norteña de Picardie y ahora se centra en varios poblados que pudieran ser posibles refugios para los dos sospechosos, dijo a los reporteros el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve.

El presidente Francois Hollande, acompañado por parisinos, turistas y líderes musulmanes, hizo un llamado a la tolerancia luego del ataque terrorista más grave en el país en varias décadas. Al mediodía, el metro se detuvo y una multitud guardó silencio en torno a la Catedral de Notre Dame en honor de las víctimas del miércoles.

Uno de los sospechosos del asalto a Charlie Hebdo, Cherif Kouachi, tiene antecedentes por canalizar combatientes yihadíes para la insurgencia iraquí y fue sentenciado por cargos de terrorismo en 2008. El y su hermano, Said, deberían ser considerados «armados y peligrosos», dijo la policía francesa en un informe a primera hora del jueves, haciendo un llamado a testigos después de una infructuosa búsqueda en la ciudad de Reims, en la región de Champaña.

Un tercer hombre, Murad Hamyd, de años 18, se entregó en una comisaría de una pequeña localidad de la región tras saber que su nombre estaba siendo vinculado a los ataques en medios de comunicación y redes sociales, dijo la portavoz de la fiscalía de París, Agnes Thibault-Lecuivre. No ofreció detalles sobre la relación de Hamyd con los hermanos Kuachi.

Valls dijo que los sospechosos podrían haber sido seguidos por los servicios de inteligencia, pero «el riesgo cero no existe».

PARÍS (AP)