Un robot se posó sobre un cometa por primera vez en la historia de la Humanidad

El robot Philae de la sonda espacial europea Rosetta se posó este miércoles sobre un cometa a más de 510 millones de kilómetros de la Tierra, un hito sin precedentes en la historia de la conquista espacial.

«Philae nos está hablando, está posado en la superficie» del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko, anunció en una explosión de júbilo Andrea Accomazzo, director de vuelo de la Agencia Espacial Europea (ESA) desde el centro de operaciones en Darmstadt, Alemania.

Desde el 6 de agosto y tras más de 10 años de viaje interplanetario, la sonda no tripulada europea Rosetta se desplaza a escasas decenas de kilómetros del cometa, acompañándolo en su desplazamiento a medida que se aproxima al Sol.

El módulo Philae cuyo «aterrizaje» exitoso desencadenó una salva de aplausos en el centro espacial, permitirá explorar directamente el núcleo del cometa, es decir la parte sólida que por el efecto de la radiación solar genera la «coma» o cabellera y deja una cola visible de gases y polvo.

A la velocidad de la luz, los datos enviados a la Tierra mediante señal de radio demoran 28 minutos y 20 segundos en llegar al centro de operaciones de Darmstadt.

El cometa se encuentra actualmente viajando entre las órbitas de Júpiter y de Marte. Mide unos cuatro kilómetros de diámetro, con una forma irregular con dos núcleos.

La superficie del cometa está cubierta de polvo, su temperatura es de unos 70ºC bajo cero y a pesar del «aterrizaje» exitoso nada garantiza la ausencia de imprevistos.

Si todo sale bien, Rosetta y su robot seguirán enviando información cuando el cometa esté en el punto de su trayectoria más cercano al Sol, en agosto de 2015.

Luego se anticipa que bajo el efecto del polvo y las proyecciones deje de escrutar los secretos del cuerpo celeste y se de por finalizada la misión.

ROSSETA COMETA UNO12

Alemania, AFP