Guatemala: La meta para el nuevo presidente es la lucha contra la corrupción

El presidente electo de Guatemala, el comediante Jimmy Morales, sin ninguna experiencia política y un partido frágil en el Congreso, enfrenta ahora el gigantesco desafío de cumplir con su promesa de combatir la corrupción, en uno de los países con mayor pobreza y violencia de América Latina.

Morales, un derechista de 46 años, arrasó en la segunda vuelta del domingo con 67.44% de los votos frente a la exprimera dama socialdemócrata Sandra Torres, que alcanzó 32.56%, de un total de 4.2 millones de sufragios emitidos, según informó el magistrado Rudy Pineda, presidente del Tribunal Electoral.

Morales se convirtió en el segundo presidente electo más votado en las últimas tres décadas, superado únicamente por el exmandatario Alfonso Portillo (2000-2004), que obtuvo 68%. El exgobernante purgó una pena por corrupción en Estados Unidos.

El Presidente electo insistió ayer que su principal “compromiso es el combate a la corrupción”.

Uno de los mayores desafíos para el futuro Presidente, quien contará con sólo 11 diputados del FCN-Nación de los 158 escaños del Congreso, será sanear la gestión de los recursos públicos.

“Lo que le solicitamos al nuevo gobernante son resultados concretos desde el primer día. Queremos ver ese combate a la corrupción con resultados medibles”, demandó el presidente de la cúpula empresarial aglutinada en el Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF), Jorge Briz.

“El gran reto es evitar que haya señalamientos de corrupción ante la baja legitimidad con la que va a llegar el próximo gobierno” como las que presionaron la renuncia de Pérez, consideró Cristhians Castillo, analista político.

Excelsior