Puntarenas se quedará sin la visita de un segundo crucero que canceló su visita al país, para evitar el riesgo de que sus turistas sufran inconvenientes derivados de la huelga.
La empresa Celebrity Cruises comunicó a las autoridades que el barco Infinity ya no atracará en la costa pacífica el próximo lunes, como estaba previsto, sino que llevará a sus pasajeros a otro país.
Se trata de la misma compañía que canceló la parada del primer crucero de la temporada en Puntarenas, el cual estaba programado para el 17 de septiembre pero siguió de largo, por el temor de que los visitantes pudieran quedarse atascados en algún bloqueo de carretera.
Juan Ramón Rivera, presidente ejecutivo del Instituto Costarricense de Puertos del Pacífico (Incop), confirmó la cancelación de la visita.
“Las razones son las mismas, que tienen temor a los bloqueos para los tours y que eso puede retrasar el barco”, dijo el jerarca.
A bordo del barco habrían llegado unos 2.500 turistas, quienes usualmente permanecen en el país durante aproximadamente 10 horas. La cancelación del crucero implica que muchas familias puntarenenses que se dedican al transporte, la venta de comidas y la operación de tours dejarán de percibir los ingresos que dichos extranjeros habrían dejado en el país.
De acuerdo con Rivera, el gobierno está imposibilitado para actuar ante ese tipo de situaciones.
“No podemos hacer absolutamente nada porque es una decisión propia de las compañías navieras. Ellas son muy recelosas del cuidado de sus pasajeros y, entonces, toman cualquier cosa que ven que pueda afectar a sus pasajeros y rápidamente cancelan, porque prefieren cancelar que exponer al más mínimo riesgo a sus pasajeros”, señaló el funcionario.
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Por ahora, Celebrity es la única línea de cruceros que ha decidido cancelar sus paradas en Costa Rica. El jerarca explicó que, para las navieras, el riesgo existe mientras se mantenga el movimiento, aunque desde hace varios días no se reporta ningún bloqueo en las cercanías de Puntarenas.
“Cada línea tiene sus propias líneas de seguridad. Yo, por ejemplo, me pregunto, osea, ahí en los alrededores de Puntarenas hace días que ya no hay bloqueos, pero sigue el cuento, como la huelga no se ha acabado, ellos suponen que todo sigue igual. Entonces, aunque ya casi no hay bloqueos, porque la gente se cansó de bloquear, pero igual mientras la huelga esté declarada las compañías consideran que hay un riesgo”, dijo Rivera.
El movimiento de protesta contra el Proyecto de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas está a punto de completar las tres semanas. Hasta ahora, las negociaciones previas entre el gobierno y los sindicatos han sido infructuosas.
