Vilma Trujillo García es la joven que falleció luego de ser quemada en una hoguera por un pastor evangélico, quien aduce ante cámaras que fue culpa del mismo demonio dentro de ella el que la impulsó hasta caer al fuego.
La Policía Nacional arrestó al pastor Juan Gregorio Rocha Romero y a sus cuatro cómplices el pasado viernes, todos ellos están siendo trasladados a Managua en donde enfrentarán el delito de tentativa de homicidio.
Rocha junto a las personas que le ayudaron en el "rito religioso", sucedido en una Iglesia de las Asambleas de Dios en la comunidad El Cortezal, en Rosita, Triángulo Minero, aseguran que fue el mismo demonio que supuestamente estaba dentro de ella quien la lanzó a la hoguera, en unas declaraciones que dicen con toda naturalidad y que parecen no sentir remordimientos por lo ocurrido.
"Ella estaba endemoniada… (Lo sabíamos) por una profecía que Dios nos dijo a todos los que estábamos en la directiva (de la iglesia). Ella se suspendió y cayó en el fuego. Nosotros estábamos orando y de pronto la vimos que estaba en las llamas", dijo Rocha.
"Ella tenía siete o seis días de estar endemoniada" agregó el pastor que tiene dos años desde haber ocupado este cargo dentro de esta iglesia, aunque según Rafael Arista, superintendente de las Asambleas de Dios, éste no tiene ninguna credencial que le adjudique como tal.
"Ella cometió un error ante Dios. Ella tenía un compañero de vida y cometió error con otro hombre y ella se estaba pasando por cristiana siempre, haciendo ayuno y todo. Por eso Dios la castigó y la 'endemonió'", dijo Franklin Jarquín, otro de los acusados mientras estaban en la tina de una camioneta de la Policía Nacional.
"Fue el espíritu el que se impulsó en ella y cayó en el fuego… No era ninguna intención (nuestra) de hacer eso", aseveró Rocha, minutos antes de ser trasladado por las autoridades policiales, quien ahora junto a las otras personas involucradas esperan enfrentar la justicia.
