¿A qué edad los adolescentes pueden tener novio?

Si eres madre de una adolescente, ésta es una pregunta que debe estar preocupándote, es complicado saber cuándo es el momento ideal. No te preocupes, desde aquí arrojaremos un poco de luz a tu cuestionamiento e inquietud, para que puedas saber cuándo un adolescente puede tener novio.

Características del noviazgo adolescente

En la actualidad, hay varias formas de comenzar un noviazgo adolescente, pero éstas difieren de las que nuestros padres e incluso nosotros mismos hemos tenido. Antes, ir al cine a ver una película o bien un encuentro en un sitio público para tomar un helado o compartir un refresco, eran formas de comenzar un noviazgo.

Sin embargo, en la actualidad, internet lo ha cambiado todo. Las citas online están muy de moda entre los adolescentes; esto tiene sus pro y sus contras, por un lado hay que estar atentos a la información que nuestro hijos proporcionan a la hora de entablar una relación en línea, y por otro conocer el motivo por el cuál escogen ésta forma; puede que tengan miedo al rechazo, o algún complejo, aunque también puede ser porque se sienten más seguros.

¿A qué edad un adolescente debería tener novio?

Según la Dra. Brenda Schaeffer, psicóloga y autora de varios libros relacionados al tema, los adolescentes de hoy en día maduran antes físicamente pero a nivel emocional lo hacen de forma tardía, por lo que hay una contradicción en éste sentido, además de la presión que se puede presentar por parte de las amistades.

Entre los 14 y 15 años las niñas adolescentes comienzan a tener intentos de posibles noviazgos con amigos que generalmente son cercanos o pertenecen al grupo de amistades que frecuentan. Sin embargo, para iniciar una relación seria lo ideal que tuvieran entre 16 y 17 años; aunque todo depende del nivel de madurez que tenga el adolescente.

Sin duda ver que tu hija o hijo comienza una relación con todo lo que ello implica puede resultar muy difícil; por ello, es bueno que pienses que son posibles ensayos para que experimente sus éxitos y fracasos en las relaciones de cara a una vida adulta, en la que tendrá que saber cómo llevar una relación de pareja, qué pretende o espera y cómo desenvolverse ante un vínculo sentimental. Es mejor que le permitas vivenciarlo, ahora que tú estás ahí para sostener sus llantos y celebrar sus conquistas.