Extranjero lesionado por conducir ebrio en la Isla de Ometepe

Foto: Extranjero lesionado por conducir ebrio en la Isla de Ometepe / TN8
Foto: Extranjero lesionado por conducir ebrio en la Isla de Ometepe / TN8

El turista de nacionalidad francesa, identificado con las iniciales L. N. M. de 23 años, terminó lesionado después de perder el control de la motocicleta que conducía en supuesto estado de ebriedad.

El accidente ocurrió en la comunidad el Tistero-El Limonal, mismo lugar en donde el pasado jueves 15 de febrero un joven originario de la comunidad Mérida perdió la vida después de chocar, supuestamente, con un equino. No haber portado el casco de protección también fue un factor determinante en dicha tragedia que enlutó a una familia isleña.

Según reporte médico, el extranjero llegó a la unidad de salud de Altagracia en estado de ebriedad y en condición estable, presentando una poli contusión, quemaduras por fricción y golpes en diversas partes del cuerpo. Un agente de tránsito llegó al centro de salud y le practicó la prueba de alcoholemia, misma que dio positiva.

Motociclista grave luego de chocar contra un caballo en la Isla de Ometepe
Foto: Imagen referencia /TN8

La Policía Nacional está realizando las debidas investigaciones. Al mismo tiempo, ejecuta planes de prevención de accidentes. Aunque si usted, amigo conductor, no respeta las leyes de tránsito, los esfuerzos de las autoridades son en vano.

Ola de accidentes en Ometepe

Cabe destacar que en menos de 8 días se registran al menos cuatro accidentes y en lo que va del 2024 ya se registra la primera víctima mortal. En la mayoría de los casos están involucrados los motociclistas, mismos que no portaban el casco de protección.

Se desconoce hacia dónde se dirigía el extranjero, cuando ocurrió el incidente. Testigos lo trasladaron al centro de salud y dieron aviso a las autoridades.

Motociclista lesionado, tras chocar con equino en la Isla de Ometepe
Foto: Imagen referencia /TN8

Producto del choque, la motocicleta terminó con serios daños en la carrocería. Por fortuna, este accidente no dejó víctimas que lamentar y es, sin duda, el mejor ejemplo de que combinar el alcohol con la velocidad no es la mejor idea.