Docenas de personas que supieron de un mitin organizado por el Ku Klux Klan esperaban en un parque del sur de California el sábado por la tarde, cuando seis personas llegaron en una camioneta negra. Docenas de personas que supieron de un mitin organizado por el Ku Klux Klan esperaban en un parque del sur de California el sábado por la tarde, cuando seis personas llegaron en una camioneta negra. Los pasajeros vestían camisas negras decoradas con la cruz del Klan y parches confederados, y llevaban carteles con el mensaje «Las vidas de los blancos importan».
Un video grabado por un testigo muestra que los miembros del grupo se vieron rápidamente rodeados por manifestantes opositores, que les gritaron improperios.
Una persona destrozó la ventana de la camioneta. Un miembro del KKK apuñaló a un opositor con el extremo decorativo de un asta de bandera, desatando una dura pelea en la que tres personas fueron apuñaladas, una de ellas de gravedad, y otras dos sufrieron agresiones. «¡Me han apuñalado!», se oye gritar a un hombre, que se levanta la camiseta para mostrar una herida en el abdomen. Un surtidor de agua contra incendios, en el que el hombre se sentó brevemente, se veía cubierto de sangre. Un sargento de la policía vio a un integrante del Klan empuñando un cuchillo y a un detractor sangrando cerca del lugar, informó el sargento Daron Wyatt, del Departamento de Policía de Anaheim. El sargento arrestó al miembro del KKK. Mientras tanto, dos miembros del KKK fueron pisoteados por los manifestantes, señaló.
«Todo se descontroló», dijo Brian Levin, director del Centro de San Bernardino de Estudios sobre el Odio y el Extremismo, perteneciente a la Universidad del Estado de California, que presenció el altercado. «Creí que iban a pisotear a esos miembros del clan hasta matarlos». Wyatt dijo que había policía presente cuando comenzó la violencia, pero no indicó cuántos agentes se habían desplegado en el lugar. La policía había informado al público sobre la protesta del KKK prevista para el viernes en el parque Pearson, a casi 5 kilómetros (unas 3 millas) de Disneyland, y señalaron que supervisarían la situación por si se produjeran ilegalidades. El departamento también dijo que si bien los carteles y panfletos del grupo podrían ser provocadores, están protegidos por la Primera Enmienda. Levin dijo no haber visto agentes de uniforme en el parque cuando comenzó la violencia.
El académico dijo haber intentado colocarse entre los anti manifestantes y los hombres del Clan para sofocar la violencia hasta que los agentes pudieran llegar al lugar. «Todavía estoy un poco conmocionado por esto», dijo. El jefe de policía, Raul Quezada, defendió la gestión que había hecho su equipo y afirmó que había un contingente de agentes dedicados al mitin y la protesta, y que habían podido detener a todos los principales participantes en la refriega. «Nuestro objetivo es siempre impedir la confrontaciones violentas; por desgracia, el puñado de individuos decididos en ejercer un comportamiento delictivo esta tarde causó el episodio violento», dijo en un comunicado. Chris Barker, que se identificó como mago imperial de los leales caballeros blancos del Ku Klux Klan, dijo que los miembros del grupo celebraban una marcha antiinmigrantes pacífica y actuaron en defensa propia.
«Si nos atacan, contraatacaremos», afirmó Barker, que no asistió al acto y habló por teléfono desde North Carolina. La organización tiene Pelham, North Carolina, como su sede. El grupo fue noticia el año pasado cuando protestó por la retirada de la bandera confederada del Capitolio de South Carolina. En un principio fueron detenidas doce personas, pero cinco fueron puestas en libertad después de que los investigadores revisaran los videos del altercado, dijo Wyatt.
Los detenidos eran cuatro miembros del klan, arrestados para una investigación sobre agresión con arma letal, y tres manifestantes opositores sospechosos de pisotear a un anciano miembro del klan. La policía buscaba a otro anti manifestante sospechoso de agresión. El hombre en estado crítico se estabilizó a lo largo de la noche. El KKK tiene un largo historial en Anaheim.
En la década de 1920, algunos miembros de la organización ocuparon cargos electos en la ciudad, cuya población era mayormente blanca pero ahora cuenta con una mayoría hispana entre sus cerca de 350.000 habitantes. En enero de 2015 se dejaron ante las entradas de autos de aproximadamente 40 casas en Santa Ana 13 kilómetros (ocho millas) al sur de Anaheim paquetes con panfletos condenando a Martin Luther King, Jr. y en apoyo del Ku Klux Klan. Los panfletos iniciaban con el encabezado «En el Día de Martin Luther King, se está celebrando a un comunista pervertido».
Los volantes estaban firmados por los «Loyal White Knights of the Ku Klux Klan» (Leales Caballeros Blancos del Ku Klux Klan). A nivel nacional, la cifra de grupos activos del KKK aumentó a 190 en 2015 después de descender en 2013 y 2014, según la organización no gubernamental defensora de los derechos civiles Southern Poverty Law Center, que monitorea a grupos de odio racial. Giovanni Namdar, de 25 años y que gestiona un taller mecánico cerca del parque Pearson, dijo haber visto a gente que hablaba con pasión desde un escenario antes de que comenzara la violencia.
Después vio muchos autos policías y helicópteros en el lugar. Namdar dijo estar perplejo de saber de la presencia del KKK en su zona. «Es bastante alarmante», dijo. «No sabía que estaban en esta área».
