No perdás el tiempo: No hacer el «delicioso» seguido puede afectar tu cerebro

Tener una mala vida sexual puede afectar a tu cerebro
Foto: Tener una mala vida sexual puede afectar a tu cerebro /Cortesía

Ojo señores que según un estudio, si tienes una mala vida sexual podría predecir problemas de cerebro en tus últimos años. Así que si no estas activo todavía estás a tiempo de remediarlo.

Lo cierto es que en estudios anteriores ya se había encontrado que había algún tipo de conexión entre la función sexual y cognitiva; incluso en adultos mayores.

Sin embargo, el nuevo estudio dirigido por científicos de la Universidad de Penn State utiliza un enfoque novedoso al tener acceso a datos que les permitieron seguir a las personas a lo largo del tiempo.

Tener una mala vida sexual puede afectar a tu cerebro

Tener una mala vida sexual puede afectar a tu cerebro
Foto: Tener una mala vida sexual puede afectar a tu cerebro /Cortesía

Lo que encontraron: que los hombres de mediana edad que informaron una disminución de la satisfacción sexual y la función eréctil a medida que envejecían; también tendían a experimentar un mayor deterioro cognitivo al mismo tiempo.

Es más, de los resultados se sugiere que nuestra salud sexual está estrechamente relacionada con la salud de nuestro cerebro; aunque se debe investigar más para saber el alcance de esta conexión.

Para llegar a estas conclusiones, los investigadores analizaron los datos de cientos de hombres mayores inscritos en un estudio en curso que está tratando de precisar los factores genéticos y ambientales que afectan el cerebro de las personas que envejecen.

Tener una mala vida sexual puede afectar a tu cerebro
Foto: Tener una mala vida sexual puede afectar a tu cerebro /Cortesía

Según ha explicado el coautor principal Riki Slayday:

“Cuando mapeamos la relación a lo largo del tiempo, encontramos aumentos o disminuciones en la función eréctil y la satisfacción sexual se asociaron con aumentos o disminuciones concurrentes en la función cognitiva.

Estas asociaciones sobrevivieron al ajuste por factores demográficos y de salud, lo que nos dice que existe una conexión clara entre nuestra vida sexual y nuestra cognición”. Los autores concluyen que su trabajo es un claro indicativo de esa relación entre la salud sexual y el cerebro, pero como decíamos; se necesitan más trabajos parecidos para dilucidar la dirección de esta relación, es decir, si uno causa al otro o si ambos están influenciados por otro factor no contabilizado.

lapatilla.com