«Hambre emocional»: Qué es y cómo identificarlo

Foto: "Hambre emocional": Qué es y cómo identificarlo / Cortesía

El «hambre emocional» o a como comúnmente se le conoce «ansiedad» es una de las causantes de el incremento de peso en las personas.

En ocasiones, podemos consumir determinados alimentos ante situaciones de estrés o ansiedad; pero, conoces ¿qué es realmente el hambre emocional?.

Por su parte, una nutricionista experta en el área, dio a conocer que el hambre emocional «es la respuesta emocional a una determinada situación o proceso que se da por medio de la comida».

"Hambre emocional": Qué es y cómo identificarlo
Foto: «Hambre emocional»: Qué es y cómo identificarlo / Cortesía

Y es que nuestras formas de actuar, ante diversas situaciones «nos ayudan a evolucionar, adaptarnos al ambiente y mejorar nuestra salud mental y emocional. Pero estas respuestas también nos pueden desadaptar o empeorar nuestro estado y salud emocional»; explicó la experta.

«Hambre emocional», peligroso trastorno de ansiedad

Cabe mencionar que, el hambre emocional es una acción que buscamos compensar; por medio de ingerir alimentos que «nos hagan sentir bien» al momento que atravesamos una situación.

De igual manera, la experta comenta que; «utilizar la comida de vez en cuando como algo reconfortante no es algo malo«. Pero el problema empieza, cuando «comer es el principal mecanismo de afrontamiento que tenemos ante un sentimiento o estado».

En este sentido, la nutricionista Isabel Campos del Portillo explica que el hambre emocional es «desadaptativa» cuando únicamente logramos controlar una determinada emoción a través de determinados alimentos; pero también cuando «se come sin control».

"Hambre emocional": Qué es y cómo identificarlo
Foto: «Hambre emocional»: Qué es y cómo identificarlo / Cortesía

Por tanto, «la cuestión es darnos cuenta de que nos afecta, y trabajarlo lo antes posible en esto, antes de que se convierta en un estado normal en nosotros», insiste. Así mismo, el hambre emocional se identifica, porque se presenta como impulso y generalmente se siente una necesidad por comidas con más grasa o por los dulces.

Un paso principal para hacer que el hambre emocional se convierta en un proceso adaptativo, detalla Isabel Campos del Portillo, es aprender a gestionar las emociones, sobre todo con otras acciones saludables.

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