El Ministerio de Salud hizo el llamado este martes al respeto de los centros hospitalarios en Nicaragua, luego que se hayan dado una serie de situaciones que han atentado contra la integridad física de las personas que trabajan en hospitales, además de ataques directos contra la infraestructura de estas instalaciones.
Sonia Castro, ministra de la salud, mencionó que las familias nicaragüenses se mantienen en oraciones para que se dé el entendimiento entre todos, porque esta crisis que atraviesa el país es una dificultad que sufren todos por igual. Reconoció que se vive en la nación momentos de zozobra, dolor y también mucho odio por parte de sujetos que atentan contra la vida de los demás.
Castro hizo la denuncia sobre los actos delincuenciales contra centros hospitalarios, como lo sucedido este día en Jinotepe, donde grupos criminales atacaban ese lugar y exponían la vida de personas inocentes. Además, señaló que persiste la problemática de los tranques o bloqueos de caminos, lo que dificulta en gran manera a las familias que necesitan atención hospitalario tengan acceso a la misma.
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Recalcó que la mañana del marte el Hospital Regional Santiago de Jinotepe nunca estuvo cerrado ni estará cerrado; ya que ahí están los trabajadores, doctores, camilleros y enfermeras preparados y en disposición de atender a las personas independientemente de su razón política, religiosa, de su sexo, origen o edad.
De igual manera acusó a estos delincuentes que han secuestrado ambulancias o que han quemado vehículos institucionales, los que sirven para que se cumpla la misión humanitaria de la atención a aquellas personas que requieren de los servicios de salud.
Reiteró que las unidades de salud deben ser respetadas porque están al servicio del pueblo y que las puertas están abiertas siempre, con esa misión de servir y ser protectores de la vida.
Nicaragua sufre una crisis violenta desde hace más de 50 días, dejando un gran saldo de fallecidos y heridos, por eso mismo la ministra Sonia Castro pidió por la reflexión del pueblo nicaragüense para encontrar rutas de paz que dejen atrás todos los actos violentos.
