Lluvias torrenciales en Afganistán dejan al menos 18 muertos

Torrenciales lluvias en Afganistán dejan al menos 18 muertos
Foto:Torrenciales lluvias en Afganistán dejan al menos 18 muertos /Cortesía

Las inundaciones repentinas y las tormentas en varias provincias de Afganistán en los últimos cinco días dejaron al menos 18 muertos, indicó un funcionario el miércoles.

Cada año muchos afganos mueren a causa de las lluvias torrenciales, especialmente en zonas rurales pobres, donde las casas mal construidas pueden derrumbarse.

Según el viceministro de Gestión de Desastres, Sharafuddin Muslim, el mal tiempo de los últimos días afectó a las provincias de Faryab y Parwan en el noreste; así como a otras áreas.

En un mensaje de video dijo que «han muerto entre 18 y 20 personas en diez provincias». Y otras dos personas están desaparecidas.

Torrenciales lluvias en Afganistán dejan al menos 18 muertos
Foto: Torrenciales lluvias en Afganistán dejan al menos 18 muertos/Cortesía

Mal tiempo en Afganistán

Según el funcionario, otras 30 personas resultaron heridas y más de cien casas destruidas.

Los equipos de rescate fueron enviados a las áreas afectadas con carpas y alimentos. Y las autoridades están distribuyendo dinero a las familias de los fallecidos; agregó el funcionario.

Este tipo de catástrofe es frecuente en el país, sobre todo en las zonas rurales pobres, debido a que las casas están mal construidas y se hallan en áreas de riesgo.

Fuertes lluvias con tormentas eléctricas

Igualmente, el Departamento Meteorológico de Afganistán ha advertido de la posibilidad de fuertes lluvias con tormentas eléctricas, huracanes e inundaciones en 27 provincias del país. Además, el departamento ha pronosticado precipitaciones en diferentes lugares entre 20 y 60 mm.

Torrenciales lluvias en Afganistán dejan al menos 18 muertos
Foto:Torrenciales lluvias en Afganistán dejan al menos 18 muertos /Cortesía

Desde que los talibanes llegaron al poder el año pasado, Afganistán vive sumido en una grave crisis financiera y humanitaria. Esto provocado por la congelación de miles de millones de activos en el extranjero y el brusco cese de la ayuda internacional, que mantuvo al país a flote durante 20 años.