Policía china evita que 500 gatos acaben siendo parte del menú

Pekín, 12 jun (EFE).- La Policía china ha evitado que unos quinientos gatos acaben siendo cocinados por restaurantes del país y ofrecidos a clientes como parte de su menú, después de ser robados a sus propietarios o capturados en la calle.

Según publica hoy el portal chino "Wwangyi", las autoridades detuvieron el fin de semana a un hombre de la provincia oriental de Jiangsu que supuestamente planeaba venderlos a establecimientos de otras regiones.

La Policía descubrió a este ciudadano cuando estaba transportando a los animales y al parecer llevaba dedicándose a este negocio desde hace tiempo.

Utilizando una ave como cebo, el hombre supuestamente capturaba a los gatos en la calle o de alguna propiedad, pues entre los felinos que ofrecía a restaurantes también había animales de compañía, y los vendía por un precio de unos 30 yuanes (unos 4 dólares o euros).

Pese a lo que se cree, no es muy habitual comer gato o perro en China, aunque en algunas zonas siguen siendo un plato tradicional.

Es el caso de la ciudad meridional de Yulin, que cada año celebra un festival de carne de perro muy criticado nacional e internacionalmente, en el que se llegan a sacrificar miles de estos animales, la mayoría mascotas de compañía robadas o perros callejeros de dudosa higiene provenientes de múltiples partes del país, según denuncia la ONG Humane Society International. 

¿Porqué no debes quitarle las uñas a tu gato?

La desungulación o oniquectomía es un procedimiento quirúrgico mediante el cual se le extirpan las uñas al gato. En un principio puede sonar como algo benigno, pero en realidad no es así. Amputar las uñas del gato para que deje de arañar los muebles, es el equivalente a extraer a un humano los huesos de la punta de los dedos del pie. Dicho procedimiento puede dar lugar a problemas a largo plazo para los gatos, según ha concluido un nuevo estudio.

Los gatos a los que han extirpado sus uñas son más propensos a tener dificultades para caminar, ya que se ven obligados a modificar su forma de andar y el peso recae sobre el cartílago suave, que antes era una parte de sus articulaciones, lo que les puede llevar a padecer dolor crónico. Además, muchos dueños que han practicado una oniquectomía a su amigo felino, aseguran que este se vuelve más agresivo tras la cirugía.