Los cadáveres de 12 migrantes fueron descubiertos este miércoles en Turquía, cerca de la frontera con Grecia; anunció el ministro turco de Interior, explicando que habían muerto debido al frío.
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«De 22 migrantes rechazados por unidades fronterizas griegas tras quitarles los zapatos y mojarles la ropa, 12 han muerto congelados»; ha denunciado hoy el ministro del Interior de Turquía, Süleyman Soylu.
«La Unión Europea está desesperada, débil y no tiene humanidad. Las unidades fronterizas griegas matan a los oprimidos»; agregó el ministro en un mensaje difundido en turco e inglés.
Migrantes en la frontera de Grecia y Turquía
El ministro publicó cuatro fotos en las que se ve a 8 cuerpos tirados en el suelo, vestidos con ropa ligera; aunque las imágenes están difuminadas y no se pueden apreciar muchos detalles.
El ministro no aclaró la nacionalidad de las víctimas ni dio más detalles sobre su identidad.
El cauce del río Evros a la altura de Ipsala es un lugar de paso habitual para migrantes irregulares desde hace años; donde las corrientes y el frío se cobran víctimas a menudo, sobre todo en invierno.
Las temperaturas en Ipsala han estado apenas por encima de los cero grados los últimos días.
Expulsiones de migrantes
Turquía denuncia casi todos los días expulsiones en caliente de migrantes por parte de Grecia; normalmente en la ruta marítima entre Anatolia y las islas griegas.
Ayer mismo, la agencia oficial turca Anadolu informó sobre el rescate de un total de 163 migrantes irregulares en el mar Egeo en varias operaciones de los guardacostas turcos en las zonas de Esmirna, Bodrum y Marmaris.
En todos los casos, según ese medio, las lanchas neumáticas de los migrantes habían sido empujadas o remolcadas de vuelta a aguas turcas por parte de patrullas navales griegas.
