La comunidad católica rememoró este 02 de Noviembre, el denominado Día de los Fieles Difuntos, una tradición que se fortalece, a través de los años y que continúa arraigada a las creencias cristianas.
Es una fecha importante para muchos, en el que familias enteras visitan las iglesias y los campos santos, donde se aprovecha el momento para embellecer y limpiar las tumbas donde descansan los restos de los deudos.
Bajo ese contexto este acto simbólico tiene gran importancia social y humana, pues esa conexión entre el mundo intangible y el actual, se fundamenta, no sólo como una costumbre nicaragüense instituida por la Iglesia, sino como parte de la espiritualidad, que oportunamente recae en la ocasión de agradecer todos los beneficios, todas las gracias que Dios ha derramado en usted como persona, en la esperanzadora acción de la gran promesa, de que creer en la resurrección de los muertos y en la vida eterna.
Claudia María Chávez
