Este es el animal más grande de la historia según científicos

Este es el animal más grande de la historia según científicos
Foto: Este es el animal más grande de la historia según científicos / Cortesía

Según un grupo de investigación de científicos, el animal más grande que existió fue un enorme reptil y que fue más gigante que las ballenas de ahora.

Y es que una serie de nuevos hallazgos y la reinterpretación de otros más antiguos ha llevado a una parte importante de la comunidad científica; a considerar seriamente que los animales más grandes en la historia del planeta no son las ballenas azules.

Se sabe que la ballena azul alcanza los 30 metros de largo y pesa 199 toneladas: a lo largo de 500 millones de años de evolución animal nada se le acerca; ni siquiera los dinosaurios más grandes.

Este grupo de científicos menciona contundentes datos a favor de la hipótesis de que algunos ictiosaurios, nombre científico dado a estos voluminosos reptiles; crecieron lo suficiente como para poner en duda la supremacía de la ballena azul en términos de tamaño.

Los científicos descubrieron los restos de estos impresionantes gigantes

Por si no lo sabías, los ictiosaurios se definen como un orden extinto de saurópsidos (Sauropsida); que vivieron desde el Triásico Inferior hasta el Cretácico Superior, en los actuales territorios de América, Europa y Asia.

En 2004, Elizabeth Nicholls y su colega Makoto Manabe descubrieron enormes huesos fosilizados de un ictiosaurio cerca del río Sikanni Chief en Columbia Británica, en el oeste de Canadá.

Este es el animal más grande de la historia según científicos
Foto: Este es el animal más grande de la historia según científicos / Cortesía

La nueva especie fue bautizada como Shonisaurus sikanniensis: vivió durante el Triásico, hace unos 218 millones de años, y tenía una longitud estimada de 21 metros; siendo reconocido como el reptil marino más grande de todos los tiempos.

Los científicos aclararon que solo se identificó entre un 50 y un 60 por ciento del esqueleto.

En tanto, en 2016 fue descubierto en Lilstock, en el suroeste de Inglaterra, un gigantesco trozo de hueso de 96 centímetros de largo. Posteriormente se comprobó que era parte de un hueso surangular de la mandíbula inferior de un ictiosaurio.

El Periódico