La tormenta tropical Pilar azotó Guatemala, dejando a su paso pérdidas materiales aún por cuantificar y diversos daños en al menos 15 de los 22 departamentos del país.
La magnitud del impacto se evidenció en el sector educativo, donde 89 escuelas a nivel nacional resultaron dañadas; revelando un preocupante abandono del sistema educativo en las áreas rurales.
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Un ejemplo palpable de esta situación se vivió en la remota comunidad de Playita Copón, ubicada en el departamento de Quiché. La escuela, situada cerca de un río, se convirtió en escombros durante la madrugada del 6 de noviembre debido a las intensas lluvias de la tormenta tropical.
Andrés Sis Choc, miembro del Comité de Padres de Familia, expresó su angustia: «Se desbordó el río, derrumbó la escuela y quedó en el agua. Nosotros ya no podemos mandar a nuestros hijos a la escuela porque pueden morir ahogados en el río».
Tormenta Pilar Golpea la Educación en Guatemala
Este desastre educativo se suma a la problemática general de abandono, con la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres registrando un total de 89 escuelas dañadas a nivel nacional durante la temporada de lluvias de 2023.
Desde el inicio de la temporada de lluvias de 2023, el Sistema @ConredGuatemala ha registrado 89 escuelas dañadas en todo el país. Los padres de familias de Playita Copón están preocupados por el ciclo 2024 porque no han recibido el auxilio de las autoridades educativas. pic.twitter.com/LzHcwdReWS
— Santiago Botón 🇬🇹 (@SantiagoteleSUR) November 14, 2023
María Chen Maquín, madre de una familia afectada, señaló con preocupación: «Nuestros hijos dejaron de estudiar porque ya no hay donde; y no se han evaluado para el examen final. Estamos muy preocupados porque nadie ha venido a ver nuestra situación».
En Playita Copón, el colapso de la escuela se interpretó como la última protesta simbólica por el abandono que ha persistido durante varios años, reflejando la realidad de otras 9,000 escuelas en mal estado a nivel nacional.
El desplome del edificio escolar ocurrió el 6 de noviembre; y desde entonces, no ha recibido la visita de las autoridades correspondientes, una situación compartida por la mayoría de las comunidades inundadas.
En este contexto; la tragedia provocada por la tormenta tropical Pilar no solo se traduce en pérdidas materiales, sino que también pone de manifiesto la vulnerabilidad y el abandono sistemático de comunidades enteras; especialmente en el ámbito educativo.
