El femicidio que estremece a Costa Rica: El asesinato de Allison Bonilla

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El hombre de apellidos Sánchez Ureña es el único sospechoso de la muerte de Allison Bonilla, según la hipótesis de trabajo que maneja el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica.

Así lo confirmó el director de este cuerpo policial, Walter Espinoza, quien manifestó que la propia investigación ha llevado a pensar esto, por lo cual no habría más personas involucradas.

“Nosotros hicimos múltiples investigaciones, valoramos varias posibilidades y luego de que se agotó la investigación y se recurrieron a todas las herramientas posibles nos inclinamos desde la perspectiva científica además que sea en principio una sola persona”, comentó.

 

Lo anterior calza con la versión que dio el ahora imputado durante la declaración que brindó al momento de ser indagado por parte del Ministerio Público.

Además, el jerarca confirmó que el hombre estuvo en el lugar donde se está haciendo la búsqueda en compañía de su abogado defensor, sin titubeos y 100% seguro adujo que en ese sitio lanzó el cuerpo.

Espinoza insistió que se está manejando como un homicidio. “El caso se ha manejado con hipótesis de homicidio, el Ministerio Público pidió prisión preventiva por homicidio y durante el desarrollo del proceso el caso se ha catalogado como homicidio, eso significa que la hipótesis es que la víctima de este evento falleció”, agregó.

Búsqueda

 

Por otra parte, tras dos días de descanso, análisis de valoración y cambio de estrategia se confirmó que hoy las autoridades volverán al botadero para retomar la búsqueda de los restos de la joven.

“Vamos a tener que entrar por la orilla del río, no lo hicimos porque es necesario que se cierren las compuertas de la represa para que el cauce baje de manera representativa y nos permita ver lo que es una especie de playa que se forma”, explicó el jefe OIJ.

Respecto a cuánto tiempo más van a rastrear el cuerpo, Espinoza dejó claro que no hay un promedio establecido y no será hasta considerar que ya se revisó toda la zona que den por finalizado el operativo.

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En las labores participan agentes judiciales, miembros de la Fuerza Pública, cruzrojistas y expertos que están colaborando para intentar dar con los restos de Allison.

 

Durante los tres días que se trabajó la semana pasada se logró hacer una revisión de 300 metros de los 500 a 600 que tiene de profundidad el guindo donde fue lanzado el cuerpo.

“Vamos a hacer un barrido para poder localizar algo que pueda ser útil para la investigación, nosotros vamos a agotar todas las posibilidades trabajando de manera ordenada con planificación para alcanzar el objetivo de ubicar a la joven”, enfatizó.

 

También dio a conocer que, al tratarse de un lugar usado como botadero a cielo abierto, han encontrado varios huesos que obligaron a llevar una antropóloga forense al sitio, quien al verlos descartó que fueran humanos y más bien eran de animales.

Finalmente Espinoza dejó claro que el hecho de que no se encuentre el cadáver no impide que haya una sentencia contra el sospechoso, pues recientemente hubo casos donde se condenan imputados por asesinatos cuyas víctimas nunca se logran ubicar, informó DIARIO EXTRA.