Iverson, O’Neal y Yao al Salón de la Fama del básquet

Allen Iverson, Shaquille O’Neal y Yao Ming han sido elegidos nuevos miembros del Salón de la Fama del básquetbol estadounidense.

El anuncio se hizo el lunes antes del partido entre Villanova y North Carolina, la final del básquetbol universitario.

Iverson fue el Novato del Año en 1997 y participó 11 veces en el Juego de Estrellas. Pero está consciente de que ni su selección como nuevo integrante del recinto de las leyendas podrá borrar de la memoria colectiva su cantinfleo cuando se le preguntó si se había perdido una práctica.

«Estoy en el Salón de la Fama y puedo salir hoy a un restaurante o a cualquier otro lugar, y alguien me dirá, ‘¿práctica?’ Hablaremos de la práctica», dijo entre risas, antes de añadir que incluso sus hijos se burlan de él por la conferencia de prensa de 2002, en la que repitió la misma frase una veintena de veces. «¡Hombre!, soy un miembro del Salón de la Fama y eso es todo en lo que pueden pensar, en que yo hable de la práctica».

O*Neal, primera selección del draft de 1992, estuvo en 15 ediciones del Juego de Estrellas, fue el más valioso de la NBA en el 2000 y tres veces el más valioso de la final de la NBA.

El lunes, cuando se le presentó durante un acto ante la prensa, O’Neal reprochó en broma al maestro de ceremonias, por no mencionar que apareció en la película «Kazaam», de 1996, en la que interpretó el papel de un genio que concedía deseos.

«Shaq», que tiene muchos apodos además de ése, descartó la posibilidad de que alguien le ponga un nuevo mote en septiembre, cuando sea exaltado formalmente.

O’Neal recordó que, cuando llegó a la NBA, trató de inspirarse en las películas de artes marciales, sus predilectas.

«En todas las películas de karate hay un joven guerrero que va a muchos lugares, donde ve a los maestros y tiene que superarlos», dijo. «Así que yo iba contra todos los superastros, contra todos los grandes, porque quería ocupar su lugar y eso me motivaba».

El chino Yao, por su parte, fue la primera selección del 2002. Jugó toda su carrera con los Rockets de Houston y estuvo en ocho juegos de estrellas. No asistió al acto por encontrarse en Shanghai.