A punto de ser linchada: Turista sube a bailar en pirámide de Kukulkán en México

A punto de ser linchada: Turista sube a bailar en pirámide de Kukulkán en México
Foto: A punto de ser linchada: Turista sube a bailar en pirámide de Kukulkán en México / Cortesía

Una turista extranjera estuvo a punto de ser linchada por otros turistas y visitantes de la zona arqueológica: Pirámide de Kukulkán en México. Resulta que la mujer se subió al castillo principal, en un momento en el que las autoridades no estaba vigilando.

Los visitantes de Chichen Itza se mostraron molestos con la mujer por bailar en el monumento histórico. En un video que se difundió se observa como a una mujer, de sombrero, es jalada del cabello, mientras le echaban agua y la «corrían» del sitio en medio de insultos y lanzándole otros objetos.

A su paso, camino a las afueras de la zona arqueológica, la gente, entre ellas mujeres, se acercaba a arrojarle agua a la extranjera, mientras le gritaba “Cárcel, Cárcel, Cárcel”. Y otros más decían: “cárcel, por idiota”.

A punto de ser linchada: Turista sube a bailar en pirámide de Kukulkán en México
Foto: A punto de ser linchada: Turista sube a bailar en pirámide de Kukulkán en México / Cortesía

Casi linchan a turista por subir a pirámide en Chichén itzá

La mujer trataba de llegar a lo alto de la pirámide principal, pero se llevó un mar de recordatorios del Día de la madre; así como jaladas de pelo y baños de agua, mientras otras dos mujeres la llevaban afuera de la zona arqueológica; tras bajarla a fuerzas del Castillo principal de Chichén Itzá.

Desde hace años, tanto el INAH como el Patronato Cultural que administra el parador turístico del lugar prohibieron que la gente suba a lo alto de la pirámide, donde año con año se observa el equinoccio de primavera; esto con el fin de proteger y cuidar el legendario edificio, incluso de turista como estás.

Hace unos meses, fue famosa una foto de un perro que subió hasta lo alto del castillo principal, pero ni siquiera los trabajadores del INAH y del parador, tienen autorización para escalar en esa pirámide.

Pese al alboroto de los turistas que «corrieron» a la atrevida visitante, no hubo otros conflictos ni intervinieron elementos militares o policiacos.

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