Perder a un amigo, familiar o cualquier ser amado no es un asunto fácil de sobrellevar y menos cuando se trata de una despedida inesperada. A Jesús Enrique Ceballos Delfín, aficionado con la FIFA lo despidieron en el panteón municipal de México.
Padre de un hijo, el hombre dio su último aliento a los 32 años después de luchar contra una enfermedad. El fallecimiento de Jesús a quien sus amigos llamaban “Buzz” o “El gordo”, fue solo unos días antes de su cumpleaños número 33. Sin embargo, el verdadero festejo llegó el 1 de noviembre, fecha en la que arrancan las celebraciones del Día de Muertos en México.
Sus amigos no dejaron pasar la oportunidad de recordarlo y visitarlo en su lote del camposanto. Pero lo hicieron de la mejor manera posible, es decir festejando con uno de los juegos que más disfrutaba en vida: FIFA.
Como promesa, sus amigos se comprometieron a jugar la FIFA 23, pero Jesús no pudo completar la encomienda.
Amigos llevan su consola al panteón para jugar ‘FIFA’
Sin embargo, sus panas llevaron consola y pantalla al panteón, donde aprovecharon para convivir a los pies de la tumba de Jesús. Además, echaron algunas chelas y coronaron la noche con unas retas en el popular juego de video de futbol.
Al lugar no asistieron muchas personas, pero las que se dieron cita pudieron disfrutar una tarde agradable de juegos, charla y recuerdos.
Según algunos comentarios de los asistentes, estuvieron desde las 14:00 horas haciendo los preparativos de la tumba y se retiraron hasta después de la 1:00 a.m., prometiéndole a su amigo regresar para jugar con él.
Amigos y familiares aprovecharon la popularidad de las emotivas imágenes que le dieron vuelta a los noticieros locales, para escribirle unas palabras a Jesús a través de su Facebook.
Los que le sobreviven lo recuerdan con la frase “Aquí todo está bien o, al menos, eso me queda”. Hasta después de la muerte siempre estás bien presente, compadre Jesús Enrique Buzz. Y bien querido.
