¡De novela! Cura y monja renunciaron a sus votos por amor carnal

¡De novela! Cura y Monja renunciaron a sus votos por amor carnal
Foto:¡De novela! Cura y Monja renunciaron a sus votos por amor carnal/cortesía

Pareciera que es un capítulo más de tu novela favorita, la historia que le toco vivir a un cura de 26 años y a una monja de 22 años, es de esos amores casi imposibles, porque ambos renunciaron a sus votos para darle rienda suelta a su pasión.

Según indicó Upsocl, ambos protagonistas pertenecen a la parroquia de la Provincia de Santa Fe, y de un día para otro, se fueron.

Debido a que ambos pertenecían a la iglesia católica, misma que no permite las relaciones amorosas entre sus fieles de la categoría de ellos; renunciaron a todo lo que les impedía quedarse como una pareja.

El caso es comparado con el amorío de unos religiosos en el confesionario de una iglesia de Mérida, situación que resultó un total escándalo a nivel nacional en México, dado que la religión católica es la que más fieles tiene en dicha nación.

¡De novela! Cura y monja renunciaron a sus votos por amor carnal
Foto:¡De novela! Cura y monja renunciaron a sus votos por amor carnal/Cortesía

Cura y monja renunciaron a sus votos

Mercedes Tarragona y Daniel Genovesi, se conocieron en la parroquia de la Provincia de Santa Fe, cuando tenían 22 y 26 años, respectivamente. En ese entonces, él era sacerdote y ella, una monja de la congregación Mercedarias del Niño Jesús.

Todo inició sin que se dieran cuenta, pues el sentimiento nació de una amistad “muy limpia” que tenían, y debido a que se inmiscuye en la vida religiosa muy joven, se dieron cuenta de que su amor no podía ser.

¡De novela! Cura y monja renunciaron a sus votos por amor carnal
Foto:¡De novela! Cura y monja renunciaron a sus votos por amor carnal/Cortesía

Mercedes decidió renunciar a sus votos religiosos y alejarse de su amado; pero él no pudo estar sin ella y la siguió invitando a distintos lugares y eventos religiosos, pero finalmente se dio cuenta de que estaba enamorado y decidió dejar todo.

Actualmente, tienen 31 años de casados y dos hijas; Camila y María Carla, de 23 y 26 años de edad, respectivamente.

Los votos consecutivos de la llamada vida monástica son tres: Obediencia, castidad y pobreza, si falta alguno de ellos, se incumple todo; pues los tres son básicos, como el sacerdote que confesó su amor por una mujer en plena misa, lo que causó conmoción.