Isis Peste decidió llevar a su mascota Blade al veterinario después de percatarse que no se movía tanto como sus otras dos tortugas y que estaba engordando demasiado.
El Dr. Carsten Plischke examinó al animal y detectó un problema en su metabolismo.
La tortuguita no podía soportar más el peso de su caparazón y eso limitaba su movimiento. Fue entonces cuando Plischke tuvo que crear una «silla de ruedas» para Balde.
El veterinario tomó figuras Lego de su propio hijo y adaptó un «vehículo» que sujetó con pegamento al caparazón de la tortuga.
Aunque le tomó un poco de tiempo adaptarse a su nuevo accesorio, la tortuga transformer ahora puede trasladarse con mayor facilidad.
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Agencias
