Conchita Wurst y su irreconocible cambio de imagen

austria

La ganadora de Eurovisión 2014 participó en un festival benéfico contra el SIDA y dejó a todos boquiabiertos con su cambio de imagen.

Fue una de las artistas revelación en Eurovisión 2014, no solo por su curioso look de mujer barbuda si no por la puesta en escena de Rise Like a Phoenix. Todo ello, llevó a Conchita Wurst a ganar el Festival y a convertirse en el símbolo del respeto y la tolerancia, valores característicos del certamen eurovisivo. Aquel look de melena larga y morena, con su barba a juego, la hizo inolvidable para los eurofans. Sin embargo, su radical cambio de imagen ha dejado estupefactos a sus seguidores.

 

Conchita Wurst ganó el Festival de Eurovisión en el año 2014 y desde entonces se ha mantenido en el primer plano mediático gracias a su activismo a favor de los derechos LGBTIQ+ y desde hace poco tiempo también en su lucha contra el SIDA, virus del que es portadora.

Precisamente ha sido gracias a esta lucha contra el VIH, en un festival benéfico en Viena, donde hemos podido ver a una nueva Conchita Wurst, que nos ha sorprendido con un increíble y casi irreconocible look del que no se ha parado de hablar en redes sociales.

La cantante, que saltó a la fama en Eurovisión gracias a su impecable canción 'Rise like a Phoenix' nos tenía acostumbrados a su larga melena y su poblada barba negra pero ahora se ha pasado al rubio, se ha recortado la barba y ha decidido dejarse el pelo corto. Este cambio hace que sea difícilmente reconocible.

 

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Hay que recordar que Conchita Wurst es el personaje artístico creado por el austriaco Thomas Neuwirth, definido como 'una mujer barbuda' que pretende simbolizar la aceptación y la tolerancia entre seres humanos sin que todo trate de la apariencia. En redes sociales desde luego, adoran este cambio de look tal y como adoraban a la Conchita morena.

Aunque su transformación no ha quedado solo en las redes sociales. Wurst ha acudido a la gala benéfica Life Ball 2018 contra el SIDA (recordemos que hace unas semanas confesaba que portaba el VIH) al más puro estilo de Julie Andrew en Sonrisas y Lágrimas.

 

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