La madrugada del 25 de agosto del año 2017, un oficial de la Policía Nacional perdió la vida mientras realizaba sus labores en el sector de Las Palmas, en Managua. A pesar de haber pasado alrededor de ocho años, el supuesto responsable ya está tras las rejas y enfrentando la justicia.
Un sujeto de nombre Miguel Valentín Suazo llegó hasta el punto que el oficial Leonel Eduardo Medrano Rodríguez resguardaba, conversó con él y, al retirarse, le aplicó la llave conocida como «el popo», aprovechando el descuido del oficial.
En ese momento se acercó Aquiles Eduardo Mairena Barquero, quien le quitó el arma de reglamento y le dio un balazo en la cabeza. El oficial cayó sobre un charco de sangre y perdió la vida de manera inmediata. Antes de retirarse, Mairena le dijo a su cómplice que le quitara el arma AK que el oficial también portaba.
Ambos procedieron a irse a bordo de una motocicleta, según relató parte de la acusación presentada en contra de este hombre en el Juzgado Noveno Distrito Penal de Audiencia de Managua.

Arsenal de armas en Managua
Durante la audiencia inicial, con características de preliminar, fueron arrojados datos no solo sobre este hombre, sino también sobre su cómplice, quien ya ha sido procesado por las autoridades. Se descubrió que tenían todo un arsenal de armas escondidas en el lugar que utilizaban como guarida, en el sector de Esquipulas.
Ambos se movilizaron hasta una finca en Esquipulas, donde guardaron las armas que le quitaron al oficial y le confesaron el crimen a los demás acusados. Seguidamente, se fue al fondo de la finca, se quitó la ropa y la quemó para no dejar evidencia alguna; según continuaba la acusación.
En el intercambio de información y pruebas, el Ministerio Público detalló que, tras las investigaciones realizadas por la Policía Nacional de Managua sobre este caso, se encontraron una gran cantidad de armas, cartuchos y cargadores; además de chalecos antibalas, botas militares, uniformes de la Policía Nacional, entre otras cosas.
Tanto la acusación como el intercambio de información y pruebas se analizaron por la judicatura; quien las admitió y decidió continuar con esta causa penal.
Crimen sin piedad

El 6 de junio será el día en que dé inicio el juicio contra esta persona, quien no solo está siendo acusado de quitarle la vida a un oficial, sino también de portar ilegalmente una serie de armas que son de uso prohibido para la población.
El cómplice de este sujeto, al ser capturado; llevará la causa de manera separada, pero con la misma gravedad.
A este hombre se le atribuyen una serie de crímenes que, en su momento, causaron gran impacto en nuestro país. Creyó que había logrado escapar de la justicia, pero ahora está tras las rejas y seguramente pasará mucho tiempo sin libertad.