Ladrón en el Mercado Oriental: Roba en las narices de sus víctimas (VIDEO)

Foto: Ladrón descarado en el Mercado Oriental / TN8
Foto: Ladrón descarado en el Mercado Oriental / TN8

Los ladrones aplican todas las mañas posibles para cometer fechorías, pero este hombre de camisa celeste que se observa en este video, se pasa de sinvergüenza. Esto ocurrió en el populoso Mercado Oriental, Managua.

Se presenta al negocio presuntamente ubicado en el Mercado Oriental y como si estuviera en su casa, comienza a tomar todos los productos, como si tal le pertenecieran.

El tipo aprovecha que los dueños y empleados del negocio están afanados atendiendo a clientes para hacer y deshacer.

Una vez que toma lo necesario para llevarse, disimula de un lugar a otro y procede a retirarse sin problemas de este negocio en el Mercado Oriental.

Foto: Ladrón descarado en el Mercado Oriental / TN8
Foto: Ladrón descarado en el Mercado Oriental / TN8

Robo descarado en el Mercado Oriental

Comentan dueños del negocio que no es la primera vez que se reportan pérdidas, por lo que procedieron a revisar las cámaras, topándose con el descarado robo en sus propias narices.

Los afectados no dudan que este sujeto aplique esta misma especialidad de robos en otras tiendas del sector; por lo que hicieron públicas estas imágenes, para que otra persona (dueña de negocio) no sea víctima.

Otro punto importante es que el sujeto ingresa en tiendas donde no hay guardas de seguridad. Además, el hombre actúa solo, sin ruido y sin llamar la atención.

 

Al parecer ya hay una denuncia formal en el Distrito I de la Policía en Managua. Si usted ha sido víctima o logra identificarlo, diríjase a la estación antes mencionada.

Así que ya sabe si usted visita un negocio de ropa o calzado en el Mercado Oriental; no se moleste si un trabajador lo acompaña, ya que los dueños también toman esas medidas para evitar pérdidas.

Hasta hace unos meses, las más señaladas en cometer robos en este populoso centro de compras eran las «gancheras» y los llamados» carteristas». Desgraciadamente, ahora hay que estar «Ojo al Cristo», porque un producto que se pierda, es una pérdida para quien con tanto esfuerzo ha llegado a levantar su propio negocio.