Con lecturas de cartas de despedida y un diploma de reconocimiento por su destacada excelencia académica, así le dieron el último adiós compañeros de clase del colegio Enrique Flores a la menor, de 13 años, y a su mamá Julissa Asunción Montoya, quienes fueron privadas de la vida por su padre y compañero de vida respectivamente, el pasado fin de semana en Villa Reconciliación; Distrito VI de Managua.
“Nadie se imaginaba que nos hubiesen avisado un domingo que ella falleció, y que fuera a manos de su propio padre fue una noticia trágica y será un dolor difícil de sobrellevar”; manifestó con tristeza Cristel Meneses, su mejor amiga de colegio.
“Sus compañeros elaboraron en la sección, antes de venir, unas cartas de despedida y también un diploma de reconocimiento a la pequeña, ya que ella era una alumna destacada con un 90 por ciento de rendimiento académico. Se lo colocamos en el ataúd con un girasol y un arreglo floral que le dieron sus compañeros”; dijo su maestra de noveno grado, Tania Alvarado.
Entre llantos de familiares, amigos, vecinos y música cristiana, los cuerpos de madre e hija salieron del barrio Yuri Ordóñez, donde fueron veladas, hacia el camposanto municipal, Tipitapa, donde será su eterna morada; entre tanta impotencia y dolor por esta terrible noticia que conmocionó a todo un país.

Un terrible crimen que conmociona a Managua
Mujeres alzaron su voz para aconsejar a quienes sufren de violencia doméstica a no quedarse calladas y romper el silencio en las comisarías de la mujer o cualquier otra instancia; y evitar un desenlace tan desgarrador como este.
“No callarlo, buscar las instancias correspondientes, denunciar. Como mujeres podemos solucionarlo diciéndolo, y no callándonos. Es una situación muy dura esto”; dijo Marjorie Rivas, vecina.

“Para muchas es difícil dejar esas relaciones abusivas y tóxicas, que muchas veces dejamos pasar el tiempo y hasta los años, sin imaginar que se puede llegar a esto. Desgraciadamente, esta tragedia que está pasando su familia es algo inesperado, pero que Dios la tenga en su reino y en paz”; expresó Danesa Rivas, vecina.
Este suceso escalofriante se registró a un día de festejarse el Día del Padre; quienes se supone deben ser protectores de sus hijos y su familia; haciendo más escalofriante la noticia, condenada por toda la población.