Mareros acorralados se rinden ante policía en El Salvador

Seis pandilleros que se enfrentaron a balazos con las fuerzas especiales de la Policía, tuvieron que rendirse al sentirse acorralados por los agentes ayer por la mañana en el cantón Sitio Grande de San Juan Opico, La Libertad, departamento de El Salvador.

Después del enfrentamiento, los agentes decomisaron cinco armas largas, entre éstas un fusil M-16, un fusil AK-47, una escopeta 12 mm., un trabuco y un fusil 22 mm. Además se les incautó 80 porciones de marihuana.

La Policía informó que luego del enfrentamiento arrestaron a Ever Antonio Landaverde Torres, de 19 años, Kevin Ernesto Huezo Rodríguez de 20 y Jorge Oswaldo Méndez Alfaro de 19.  También a tres menores de edad, quienes fueron puestos a las órdenes de la Fiscalía General para que sean enviados a los tribunales de Menores. 

En el cantón donde se produjo el tiroteo hay presencia de pandilleros de la Mara Salvatrucha, quienes han llegado a atemorizar a sus residentes para sacarlos de sus casas y luego ocuparlas para reunirse a planificar sus hechos delictivos, según fuentes policiales.

El informe de la Policía detalla que el puesto policial de Villa T-Zuchi recibió información de que en el referido lugar se encontraban reunidos no menos de 20 pandilleros, que además de realizar desórdenes, estaban planeando cometer una serie de acciones criminales contra los pobladores de la zona.

Por tal motivo, fuerzas especiales de la Policía se desplazaron a la zona para verificar la denuncia ciudadana, por lo que cuando se acercaban al referido cantón por la calle principal, los pandilleros comenzaron a dispararles, originándose el intenso enfrentamiento que se prolongó aproximadamente 10 minutos.

Algunos de los pandilleros huyeron del sitio, pero seis no lograron escapar y al ver que estaban rodeados por los policías, no tuvieron otra opción que arrojar las armas al suelo y subir las manos en señal de rendición.

Tras rendirse, los policías arrestaron a los seis individuos, quienes enfrentarán cargos en los tribunales de justicia por haber atentado contra los policías, por la tenencia de las armas de guerra, por la tenencia de la droga y por pertenecer a pandillas, según fuentes policiales.

Las armas decomisadas fueron enviadas al laboratorio de la Policía para que sean sometidas a los análisis que permitan determinar si han sido usadas en hechos delictivos.