Todos tenemos conocimiento de que las frutas son muy importantes, ya que aporta nutrientes esenciales para nuestro organismo y ayuda en una dieta saludable y equilibrada.
Así como el mejor momento para ingerir estas delicias, es en la mañana para que los órganos trabajen de manera correcta.
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Pero se explica mediante la Organización de Consumidores y Usuarios, que la fruta cortada tiene un mayor riesgo de contaminación debido al contacto con la tabla, utensilios como el cuchillo, las manos de quien la manipula y el plástico que la cubre.
Hoy en día las personas acostumbran a comprar frutas ya picadas y servidas en envases para disfrutar; sin embargo, al parecer «no es buena idea» elegir la sandía, piña, papaya, melón u otras frutas cortadas a la mitad.
Fruta en trozos tiene mayor riesgo de contaminación
En un informe de la OCU señala que la vida útil de las frutas cortadas es mucho menor y deben permanecer en refrigeración para evitar el crecimiento de microorganismos. Así como evitar la Salmonella, E.Coli o Listeria monocytogenes.
Esto es lo que supone exposiciones al ambiente y agentes externos, que las frutas no sufrirían si tuviera la protección que brindan las cáscaras.
Pero ¿cómo se puede consumir frutas?
La mejor manera, es comiéndolas frescas para disfrutar de su dulzura natural, indican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Esta entidad señala que las frutas congeladas pueden ser una buena alternativa, pero deben elegir aquellas que no tengan azúcares adicionales, jarabes, cremas u otros ingredientes que añadan calorías.
Así mismo, los CDC indican que es mejor comer la fruta en lugar de los jugos, porque contiene la fibra adicional que ayuda a sentirse satisfecho.
Por ejemplo tenemos que una porción de 6 onzas de jugo de naranja tiene 85 calorías, en comparación con las 65 calorías de una naranja mediana.
Tomado de: mundosano
