¿Sudas mucho por la noche?

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"El aumento repentino de la sudoración nocturna sin esfuerzo físico debería ser un motivo para una visita al médico", afirmó la profesora Christiane Bayerl, directora de la Clínica de Dermatología y Alergología de Wiesbaden.

La mayoría de las causas de los sudores nocturnos son inofensivas: una habitación demasiado caliente, una manta demasiado gruesa o ropa demasiado abrigada. También problemas psicológicos tales como estrés pueden causar sudor. Además, algunas enfermedades mentales o medicamentos pueden provocar el sudor nocturno.

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Sin embargo, hay algunas enfermedades que se manifiestan principalmente por la sudoración excesiva del cuerpo durante la noche.

"Lo que más llama la atención es la repentina aparición de sudores nocturnos más allá del nivel que normalmente se experimenta bajo una manta caliente", explicó Bayerl, al agregar que es normal que haya hasta 1,5 litros de sudor por noche.

Enfermedades graves

El sudor nocturno puede ser causado por una diabetes o un trastorno metabólico. Por ejemplo, "puede ser un indicio de un mal funcionamiento de la glándula tiroides", afirmó la dermatóloga.

No obstante, algunas enfermedades graves también pueden manifestarse a través de los sudores nocturnos.

La sudoración nocturna es típica en algunos trastornos, especialmente si la víctima tiene fiebre y pérdida de peso. Esta ocurrencia común de sudores nocturnos, pérdida de peso y fiebre también se llama síntomas B, Puede estar asociado con enfermedades infecciosas graves como la tuberculosis o la infección por VIH, o puede indicar una enfermedad maligna como el linfoma o la leucemia.

 

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Si la sudoración nocturna no se debe a enfermedades u otras causas, se habla de la llamada sudores nocturnos idiopáticos.

Los cánceres como la leucemia o los linfomas en particular pueden llevar a sudores nocturnos abundantes. Sin embargo, también suelen presentarse otros síntomas. Estos incluyen en particular la pérdida de peso y los ataques de fiebre. Agregó que es mejor hacer un examen médico que incluya una muestra de sangre y un ultrasonido de la glándula tiroides para descartar la posibilidad de padecer enfermedades graves.