La depresión y la ansiedad son tan dañinas como el cigarrillo

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Cada vez se le presta más atención a la salud mental de la población, y con mucha razón: las enfermedades físicas se relacionan muy de cerca con las mentales, algo que se ha estado comprobando recién en estos últimos años.

Los daños que hace el cigarrillo y la obesidad en la salud de las personas sí tienen bastante evidencia científica detrás. Por eso, Andrea Niles y Aoife O’Donovan se encargaron de basarse en estos datos para realizar la comparación, a través de un estudio que observó los datos de salud de 15 mil personas mayores en un período de cuatro años.

La depresión y la ansiedad son tan dañinas como el cigarrillo
En el estudio, el 16 % de las personas (que totalizaban más de 2000) padecían altos niveles de ansiedad o depresión. Esos participantes estaban en un riesgo más alto de enfermedades que los demás: 65 % más chances de enfermedades cardiovasculares, 64 % de infarto, 50 % de hipertensión y 87 % de artritis, dice el estudio, en comparación con aquellos que no mostraban índices altos de enfermedades mentales.

O’Donovan afirmó que estas probabilidades «son similares a aquellas de los participantes que fuman o que tienen obesidad». Sin embargo, en algunos casos, el riesgo de enfermedad de las personas con ansiedad era mucho mayor, como es el caso de la artritis.

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La buena noticia es que no se encontró incidencia de cáncer para las personas depresivas o ansiosas, como sí está comprobado para los fumadores. «Nuestros resultados se alinean con muchos otros estudios que muestran que el estrés psicológico no es un factor de riesgo de muchos tipos de cáncer», dijo O’Donovan. «Necesitamos dejar de atribuir diagnósticos de cáncer a historias médicas de estrés, depresión o ansiedad.» Pero esto no significa que no debamos cuidar nuestra salud mental.

Según datos de la OMS, más de 300 millones de personas viven hoy con trastornos depresivos, lo que significa un aumento de más de un 18 % de 2005 a 2015. En las Américas, casi el 6 % de las mujeres y casi el 4 % de los hombres tienen depresión. En cuanto a ansiedad, el número asciende a casi un 8 % para ellas y se mantiene constante para ellos.

Con estos números, la comunidad médica debería comenzar a dar más importancia a las medidas preventivas en materia de salud mental. Así es como piensan los autores del estudio: «Los síntomas de ansiedad y depresión están fuertemente asociados a una débil salud física y, sin embargo, estas condiciones continúan recibiendo limitada atención […], comparadas con el cigarrillo y la obesidad», dijo Niles para la Universidad de California. «Hasta donde sabemos, este es el primer estudio que comparó directamente la ansiedad y la depresión con la obesidad y el cigarrillo como factores de riesgo para enfermedades», continuó.

Estos resultados demuestran el «costo a largo plazo de no tratar la depresión y la ansiedad», opinó O’Donovan. «Sirven como un recordatorio de que tratar las enfermedades mentales puede ahorrar dinero para el sistema de salud