La Asamblea Nacional de Nicaragua avanza en la consolidación del sistema electoral con la aprobación de los 162 artículos de la nueva Ley Electoral, un marco legal que busca garantizar transparencia, equidad y participación ciudadana en los procesos electorales.
Esta ley introduce cambios clave en la organización de los comicios, asegurando un sistema más eficiente y accesible para todos los nicaragüenses.
Además, una de las innovaciones más destacadas es la figura del Co-Presidente y la Co-Presidenta, un esquema de liderazgo que promueve la equidad de género; y la corresponsabilidad en la toma de decisiones gubernamentales.
Se establecen modificaciones en la duración y estructura de los períodos de gobierno, siendo el nuevo período de 6 años; esto con el objetivo de garantizar estabilidad política y una transición ordenada del poder.

Nicaragua da un paso histórico con la creación de nueva Ley
También, comentó, Irma Dávila, diputada y presidenta de la Comisión de Asuntos de la Mujer «Tenemos una garantía constitucional, ahora que hemos reformado la Constitución Política de la República de Nicaragua; donde la equidad de género queda como modelo constitucionalizado. Esto significa que es un gran reconocimiento al trabajo que hemos venido realizando las mujeres a través de todas las etapas de la lucha. Tenemos una garantía de que en Nicaragua siempre estará ocupando la presidencia un hombre y una mujer, y esto tiene que ver con un reconocimiento a todo ese esfuerzo».
La nueva legislación reafirma el compromiso con la equidad de género al establecer una cuota del 50 % para mujeres y 50 % para hombres en la conformación de las juntas directivas de los partidos políticos; y en la designación de cargos públicos.
No obstante, otro punto fundamental es el fortalecimiento del rol de los fiscales partidarios. Los partidos políticos podrán nombrar fiscales titulares y suplentes que acompañarán el proceso electoral desde su inicio hasta el escrutinio final; y estos tendrán derecho a estar presentes en los centros de votación, el centro nacional de cómputo y a interponer recursos en caso de inconformidad con los resultados.

Nueva Ley Electoral para modernizar su democracia
«Esta nueva ley electoral reafirma los derechos de autodeterminación del pueblo de Nicaragua. Ningún partido político de otro país, ningún organismo internacional, ninguna empresa, ningún estado puede financiar a los partidos políticos nicaragüenses, porque eso sería injerencista. Eso sería violentar un principio del derecho internacional que es el no injerencismo, la no intervención, la no manipulación, la no incidencia en asuntos internos»; comentó Carlos Emilio López, diputado de la Asamblea Nacional.
De igual manera, con esta nueva Ley Electoral, Nicaragua da un paso importante en la modernización de su sistema democrático. Es por ello, que la implementación de herramientas digitales, la equidad de género, la mayor fiscalización de los comicios y el fortalecimiento del padrón electoral son avances significativos que garantizan procesos más participativos.