En el programa Estudio TN8, el Cro. Eduardo Escobar, Secretario de CONATRADEC, y el Sr. Heberto Arturo Rivas, cofundador de De La Finca Specialty Coffee, compartieron detalles sobre el crecimiento, los desafíos y el futuro del café nicaragüense; un producto que se ha convertido en un orgullo nacional y un referente de calidad a nivel internacional.
Heberto Rivas, representante de De La Finca Specialty Coffee, destacó el origen familiar y el arraigo cultural detrás de su marca. «Somos originarios de San Juan de Río Coco, pueblo al norte de Nicaragua, 100 por ciento productor de café. Allá es común mencionar que los cultivos son De La Finca. Por eso es que De La Finca es un café cultivado con amor para la familia nicaragüense. Por eso decidimos usar el nombre como la marca», explicó Rivas.
- Te interesa: IPSA certifica café para exportación internacional
Además, resaltó que su empresa maneja toda la cadena de producción, desde la semilla hasta la taza, lo que garantiza un café de alta calidad. «Somos una empresa integrada de manera vertical, desde la semilla hasta la taza, manejamos toda la cadena, le aseguramos a nuestro cliente un café de alta calidad», aseguró.
Crecimiento y proyección del café nicaragüense
Por su parte, Eduardo Escobar, Secretario de CONATRADEC, compartió datos alentadores sobre la producción de café en Nicaragua. «En Nicaragua ahorita tenemos una proyección muy positiva, en términos generales, son más de 54 mil unidades productivas en el país, que están distribuidas en no menos de 235 mil manzanas. De esta, el 98% es café arábigo y el 2% café robusta«, detalló.
Escobar también mencionó que, en los últimos ciclos, la producción ha superado los 3 millones de quintales, y se espera que este año se alcancen los 3.3 millones de quintales. «De esto esperamos este año, en este nuevo ciclo, completar al menos 3.3 millones de quintales que se vaya a producir», afirmó.
Además, señaló que el crecimiento con respecto al ciclo anterior sería de alrededor del 3%. «El ciclo anterior fue de 608 millones de dólares, y para este se espera que supere los 650 millones de dólares», agregó.

Desafíos globales y oportunidades del café de Nicaragua
Uno de los principales desafíos que enfrenta el sector cafetalero a nivel global es el impacto del cambio climático. Escobar explicó que el 40% del café que se consume en el mundo proviene de Brasil, y que el año anterior, una sequía en ese país redujo los inventarios globales, lo que provocó un alza histórica en los precios en la bolsa de Nueva York.
«Eso viene a compensar directamente la producción, pero hay un trabajo también con el tema de la comercialización. Lo que necesitamos es que quien reciba esas utilidades, esas ganancias, sea meramente las familias productoras»; subrayó Escobar.
A pesar de estos desafíos, Nicaragua ha logrado posicionarse como un productor de café de alta calidad, con más de 57 países comprando su café. «Otro punto a favor de Nicaragua y su café es la gestión de la calidad, buen trabajo y manejo de la parte productiva»; destacó Escobar.

Innovación y calidad en De La Finca Specialty Coffee
Heberto Rivas compartió que De La Finca Specialty Coffee pronto abrirá su sexta tienda en Managua, consolidándose como un referente en el mercado local. «Café de alta calidad, nos distinguimos por eso. Nacimos hace nueve años, fuimos la primera cafetería de especialidad en Nicaragua», indicó.
Además, Rivas explicó que su empresa ha innovado en el mercado ofreciendo variedades únicas. «Vimos que había un vacío en el mercado local y decidimos irlo llenando poco a poco, conforme pasa el tiempo. Nosotros fuimos lo primero que empezamos a servir de proceso, naturales, honey, así como variedades. Al día de hoy manejamos al menos 15 variedades», aseguró.
Esta cafetería ha recibido reconocimientos internacionales, destacándose en certámenes como la Taza de la Excelencia. «En el Top 100 de las mejores cafeterías del mundo, y además ha sido Top 10 y Top 15 de la Taza de la Excelencia»; refirió Escobar.
Heberto Rivas, por su parte, expresó el orgullo que siente por su legado familiar en el mundo del café. «Para mí el café es un orgullo, soy de cuarta generación. Lo comenzó mi bisabuelo Lucío Melgara, lo continuó mi abuelo Pablo Melgara, mi papá, mi mamá y es toda una historia en la familia», compartió.

Retos y oportunidades futuras
Finalmente, ambos panelistas coincidieron en que uno de los principales retos para el café nicaragüense es la comercialización digital y la competitividad global. «Nicaragua tiene una gran oportunidad porque ha sabido diversificar el café, exportando a más de 57 países. Quienes nos pagan el mejor café son los países asiáticos, entre ellos Japón, Corea del Sur y China», señaló Escobar.
El café en Nicaragua no solo es un motor económico, sino también una fuente de empleo para cientos de miles de personas. «El café en Nicaragua emplea a 400 mil o 500 mil personas en promedio. Cada ciclo son entre 70 y 80 millones de latas», concluyó Escobar.
Con un legado de calidad, innovación y tradición, el café nicaragüense sigue posicionándose como uno de los mejores del mundo; enfrentando los desafíos globales con determinación y mirando hacia un futuro prometedor.
