Las principales ciudades de China registraron notables repuntes en el arribo de turistas durante las vacaciones de la Fiesta de la Primavera; en la medida que la demanda acumulada se desató luego de que el país optimizara las medidas de respuesta a la COVID-19.
Datos oficiales revelados por la Administración Municipal de Cultura y Turismo de Shanghai muestran que esta ciudad, un centro financiero al este de China, recibió más de 10 millones de visitas a lo largo de los siete días de las vacaciones, con ingresos por concepto de turismo que alcanzaron los 16.640 millones de yuanes (2.500 millones de dólares). Las principales atracciones turísticas de la ciudad contabilizaron más de 4,1 millones de visitas, lo cual equivale alrededor del 90 por ciento de la cifra registrada durante el periodo vacacional de la Fiesta de la Primavera en 2019.
- Te puede interesar: Málaga: Desarticulan a un grupo que introducía cocaína a gran escala en Europa
La capital Beijing dio la bienvenida a más de siete millones de arribos en el mismo lapso, para generar así ingresos de 7.460 millones de yuanes, marcando de este modo un incremento de 6,2 y de 57,6 por ciento, respectivamente, en relación con el año previo. Cada viajero gastó un promedio de 1.047 yuanes en la ciudad, lo cual supone un aumento de 48,4 por ciento interanual y un 4 por ciento más alto que el registro de 2019.
Fiesta de la primavera en China
Otras ciudades de importancia turística, tales como Xi’an, Sanya, Harbin y Chongqing; evidenciaron una sólida recuperación durante los siete días del festival; en los cuales se apreció a los visitantes congregándose en restaurantes y lugares populares para el turismo.
«Esperé 40 minutos por un roujiamo», afirmó un turista en Xi’an, ciudad de la provincia noroccidental de Shaanxi. El roujiamo, también llamado la hamburguesa china, es una comida callejera característica en esta antigua ciudad, donde se encuentran los Guerreros de Terracota.
Además de los recorridos por atracciones turísticas icónicas, los viajes rurales cortos en áreas suburbanas también fueron objeto de un repunte.
En las áreas rurales de Beijing se registraron más de 1,34 millones de visitas; esto es, unos incrementos del 54,4 por ciento interanual y del 22 por ciento respecto a 2019. Los ingresos operativos totales derivados de esta actividad fueron de 162,9 millones de yuanes, lo que significa un ascenso del 18 por ciento interanual y del 51 por ciento sobre la cifra de 2019.
«Yo pensaba en una forma distinta de celebrar el Año Nuevo chino, entonces vine aquí con mi familia, subí a la Gran Muralla en Mutianyu y experimenté las costumbres tradicionales, como hacer recortes de papel y la danza del león. El movimiento y el bullicio de la vida en el campo me lleva de regreso a mi infancia», relató un visitante de apellido Wang.
La Fiesta de la Primavera de 2023 es la primera en tres años en que los chinos no se han visto obligados a permanecer confinado;s o sujetos a restricciones de movilidad mientras transcurren las celebraciones, para evitar rebrotes de COVID-19 a gran escala.
