Malasia entregará el cuerpo de Kim Jong-nam a Corea del Norte

Malasia entregará el cuerpo del hermanastro del dirigente norcoerano Kim Jong-un, prometió el jueves el viceprimer ministro, tras el arresto de una segunda sospechosa, tres días después de este asesinato, digno de una novela de espionaje. 

Kim Jong-nam, de 45 años, falleció el lunes tras haber sido atacado por dos mujeres que le habrían rociado la cara con un líquido en el aeropuerto internacional de Kuala Lumpur. Falleció poco después mientras era trasladado al hospital.

Corea del Norte no emitió ninguna declaración sobre el homicidio, que Seúl imputa a agentes de Pyongyang, pero diplomáticos norcoreanos se opusieron a la autopsia, practicada por investigadores malasios, indicó la policía de este país del sureste asiático.

Una sospechosa de 25 años y con pasaporte indonesio fue detenida en la madrugada del jueves, al día siguiente de la detención de otra mujer, de 28 años en posesión de un pasaporte vietnamita.

Ambas mujeres están siendo interrogadas, precisó la policía.

Según responsables de los servicios de información surcoreanos, Kim Jong-nam fue envenenado por agentes norcoreanas en el aeropuerto de la capital malasia, cuando se disponía a embarcar para Macao, una región administrativa de China donde vivió durante años exiliado.

 

– Contra la autopsia –

 

Las imágenes de las cámaras de seguridad publicadas por medios malasios muestran a una asiática, presentada como una de las sospechosas, vestida con una camiseta blanca con las letras "LOL" estampadas.

Los investigadores obtuvieron una orden de detención de siete días para la primera sospechosa, Doan Thi Huong, y para la segunda, Siti Aishah.

La policía también detuvo a un malasio que les permitió dar con la segunda sospechosa y que colaboró con la investigación. 

El cuerpo de Kim Jong-nam permanece en un hospital de Kuala Lumpur, donde se le practicó una autopsia. Los resultados del análisis sin embargo no han sido difundidos.

Corea del Norte solicitó a través de la policía y del hospital la restitución del cadáver, declaró el vice primer ministro malasio, que dijo que su país estaba dispuesto a enviar el cuerpo. 

"Facilitamos el pedido de cualquier gobierno extranjero, aunque hay que respetar los procedimientos", declaró Ahmad Zahid Hamidi a los periodistas.

"Nuestra política consiste en honrar las relaciones bilaterales con cualquier país extranjero", indicó, agregando que el asesinato no afectará a las relaciones bilaterales. 

Sin embargo, Abdul Samah Mat, jefe de la policía del estado de Selangor, donde está ubicado el aeropuerto, señaló que no habían recibido ninguna petición de restitución del cuerpo.

Corea del Norte se había opuesto a la autopsia, declaró a la AFP un responsable malasio cercano a las investigaciones. "Pero les dijimos que se aplicaba la ley malasia", declaró a la AFP un responsable malasio próximo al caso.

 

– El error de Disneyland –

 

Varios representantes de la embajada de Corea del Norte en Malasia fueron sin embargo vistos en el servicio de medicina legal del hospital el miércoles por la tarde, y de nuevo un poco más tarde, en la noche.

Kim Jong-nam, considerado un tiempo como el sucesor del régimen, cayó en desgracia cuando en 2001 protagonizó un incidente embarazoso para el régimen comunista. Fue detenido en el aeropuerto de Tokio con un pasaporte falso de la República Dominicana. En aquel momento, afirmó que quería visitar el parque de atracciones Disneyland.

Desde entonces vivió exiliado con su familia en Macao, Singapur o China. Viajó en múltiples ocasiones a Bangkok, Moscú y Europa.

Hacia el final del mandato de su padre, se mostró crítico con la sucesión a la cabeza del régimen norcoreano. Cuando su hermanastro llegó al poder, en 2011, expresó sus dudas sobre sus capacidades para gobernar.

Los anuncios de purgas, ejecuciones y desapariciones -algunas confirmadas, otras no- se han multiplicado desde entonces.

Kim Jong-nam escribió en 2012 a Kim Jong-un para implorarle que le perdonase la vida, a él y a su familia, afirmaron el miércoles diputados surcoreanos después de entrevistarse con el responsable de los servicios de inteligencia de su país.