FIFA: jugadores de Superliga no podrán estar en el Mundial

futbol

Las grandes figuras del fútbol serían castigadas y no se les permitiría jugar en la Copa Mundial si es que ellos participan en una Superliga europea privada, advirtió el miércoles el presidente de la FIFA Gianni Infantino.

Infantino, en declaraciones a un pequeño grupo de reporteros en la sede de la FIFA, dijo que la entidad rectora del fútbol castigaría a jugadores de clubes como el Barcelona, Manchester City y Bayern Múnich si es que deciden apartarse de la estructura tradicional del fútbol para formar una liga privada.

"O estás con nosotros, o no estás con nosotros", dijo Infantino, diciendo que los futbolistas que jueguen en la liga privada también serían excluidos de ligas como la Eurocopa y ligas nacionales. "Esto incluye todo".

El tema de la Superliga surgió el viernes, cuando la revista alemana Der Spiegel publicó documentos y mensajes electrónicos confidenciales de clubes y futbolistas.

Se reveló que el Real Madrid trabaja con asesores en concebir una Superliga de 16 equipos a ser lanzada en 2021 — prácticamente reemplazando a la Liga de Campeones y fuera del control de la UEFA.

Según el plan, 11 clubes de renombre en España, Inglaterra, Alemania, Italia y Francia recibirían porcentajes de propiedad y formar parte de la Superliga durante 20 años, sin riesgo de descenso. También se invitarían a cinco clubes más de esos países a la competencia.

El alejarse de la estructura tradicional del fútbol — la FIFA, las seis confederaciones continentales y las 211 federaciones nacionales — conllevaría sanciones a los jugadores de esos clubes, vedándoles participar en torneos importantes, incluyendo la Copa Mundial 2022 en Catar.

"La idea es que si te vas, te vas. No mantienes un pie aquí y un pie allá", dijo el director legal de FIFA Alasdair Bell. "Ese sería la estrategia general que vamos a seguir, pero por supuesto los abogados pueden debatir esto durante mucho tiempo".

Tanto Infantino como Bell trabajaron durante mucho tiempo con la UEFA, que ha aumentado la bolsa de premios de la Liga de Campeones y las reglas de participación en favor de los clubes de la elite del continente para frenar las amenazas de una posible liga privada.

"Esta es la historia de los últimos 20 años", dijo Infantino, quien este año mantuvo diferencias con dirigentes del fútbol europeo y líderes de clubes por la propuesta de una Copa Mundial de Clubes de la FIFA, financiada por el inversionista japonés SoftBank.

Infantino dijo que su plan — que potencialmente incluiría al menos 12 clubes europeos dentro de los 24 equipos participantes, y con una promesa de invertir 3.000 millones de dólares cada cuatro años — era una buena alternativa a una liga privada.

"La Copa Mundial de Clubes es la respuesta a cualquier conato que se piense, incluso para cualquier tipo de liga privada", puntualizó.