Mujer de Australia es condenada por atar y torturar a su hijo en una jaula de perros

Madre condenada en Australia por torturar a su hijo 
Foto: Madre condenada en Australia por torturar a su hijo /Cortesía

Un tribunal de Australia condenó a 20 años de prisión a una mujer que casi condujo a su hijo de 12 años a la muerte, encerrándolo en una jaula para transportar perros.

En este caso, que conmocionó al país alpino, la acusada de 33 años fue declarada culpable de tentativa de asesinato, tortura de menores y secuestro; tras siete horas de deliberaciones el jueves por la noche.

Una amiga suya, de 40 años, supuesta cómplice, fue condenada a 14 años de cárcel por haber incitado con mensajes de chat y llamadas telefónicas el «recurso continuo a la violencia» contra el niño.

El tribunal ordenó su internamiento en un centro de terapia forense, ya que el peritaje psiquiátrico demostraba «trastornos psíquicos graves y duraderos»; sin que se aboliera la «capacidad de discernimiento».

Madre condenada en Australia por torturar a su hijo

Madre condenada en Australia por torturar a su hijo 
Foto: Madre condenada en Australia por torturar a su hijo /Cortesía

El niño, ahora de 13 años, fue «completamente destruido», estimó la presidenta del tribunal penal.

Durante el juicio, la acusada afirmó que simplemente quería «disciplinar» a su hijo y dijo que «estaba terriblemente apenada por lo sucedido»; según informó la agencia APA.

El 22 de noviembre de 2022, fue hallado el niño en coma, con hipotermia, y trasladado al hospital. Al día siguiente, la madre, soltera y desempleada, fue detenida en Krems, al oeste de Viena.

Durante varios meses, había rociado al niño con agua fría mientras abría las ventanas del apartamento a pesar de las temperaturas exteriores inferiores a cero. Su temperatura corporal descendió a 26,8 ºC.

Madre condenada en Australia por torturar a su hijo 
Foto: Madre condenada en Australia por torturar a su hijo /Cortesía

El menor, salvado in extremis, pesaba 40 kilos. 

También lo golpeó, lo privó de alimentos, lo ató y lo encerró en una jaula para transportar perros. Durante la audiencia se mostraron videos de la acusada en los que se veía al niño incapaz de moverse y hablar.

La defensa señaló posibles fallas de las autoridades cuando la escuela había emitido informes insistentes.  Unas semanas antes de su hospitalización, el niño había huido y pidió a una familia que lo alojara.

Según el diario austriaco Der Standard, la policía lo volvió a conducir a su casa.

afp