Reducir la contaminación del aire evitaría 50.000 muertes en Europa

Europa

Reducir la contaminación del aire a los niveles recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) podría evitar más de 50.000 muertes al año en Europa, según un estudio publicado el miércoles, que pide una acción rápida.

La OMS estima que la contaminación del aire mata a más de siete millones de personas al año en todo el mundo y también causa enfermedades y absentismo laboral.

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El umbral recomendado por la OMS para las partículas finas PM2,5 es de 10 microgramos/m3 como promedio anual y para el dióxido de nitrógeno (NO2) de 40 μg/m3 como media anual.

La nocividad para la salud de las partículas finas está demostrada, en particular en las zonas urbanas (mortalidad y enfermedades cardiovasculares y respiratorias, trastornos del embarazo y del crecimiento fetal …).

El estudio, publicado en la revista Lancet Planetary Health, calculó las muertes prematuras vinculadas a estos dos contaminantes en 1.000 ciudades europeas.

Respetar las recomendaciones de la OMS permitiría evitar 51.213 muertes prematuras por año, según los investigadores.

El estudio "muestra que muchas ciudades siguen sin hacer lo suficiente contra la contaminación del aire", estima Mark Nieuwenhuijsen del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal).

El número de muertes relacionadas con la contaminación del aire varía según las ciudades. Las más afectadas se hallan en Polonia, la República Checa y en la llanura Padana (también conocida como Valle del Po), en Italia.

Acción rápida

Por el contrario, la capital de Islandia, Reikiavik, Tromsø en Noruega, Umea en Suecia y Oulu en Finlandia son las menos expuestas.

En promedio, el 84% de la población de las ciudades está expuesta a niveles superiores a los recomendados por la OMS para los PM2,5 y el 9% para el NO2.

Según Sasha Khomenko, coautor del estudio, es importante aplicar medidas adaptadas a las condiciones locales, porque los niveles de contaminación varían. Hay que realizar cambios en el tráfico rodado, la industria, los aeropuertos, los puertos, pero también en la calefacción de leña y carbón.