Chino paga 1,25 millones de euros por la paloma más cara del mundo

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Armando es una paloma mensajera macho criada en el establecimiento belga de Joel Verschoot, uno de los más reputados del mundo. El animal fue subastado en línea por 1,25 millones de euros, lo que la convierte en el ave más cara de la historia, tal y como anunció el sitio especializado Pigeon Paradise (Pipa).

Estaba entrenada por los mejores, tenia pedigrí y había sido la campeona de las tres carreras más importantes del mundo, pero la venta de Armando superó todas las expectativas al alcanzar un precio récord.

”Fue increíble, una sensación completamente fuera de este mundo”, explica en declaraciones en la BBC el presidente de la casa de subastas PIPA, Nikolaas Gyselbrecht. “Nunca esperamos un precio como ese. Teníamos la esperanza de estar entre los 400 o 500 mil euros”, añadió

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Según Pipa, la paloma mensajera más cara de la historia de las ventas por internet hasta ahora era ‘New Bliksem’, vendida en noviembre de 2018 por 376.000 euros.

Dos compradores chinos se enfrascaron en una intensa disputa de pujas para conseguir a Armando, esto elevó el precio por encima del millón en poco más de una hora. Aunque, gracias a sus galardones, se sabía que esta palomas podía alcanzar récords de venta entre los compradores chinos.

El interés en China por las palomas mensajeras ha crecido en los últimos años, lo que ha elevado el precio de venta de estos animales, sobre todo las que son campeonas. Estas palomas compiten en carreras donde gana el animal que es capaz de regresar a su palomar desde un punto de salida ubicado a cientos de kilómetros.

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Armando era obvio que generaría mucho interés entre los compradores chinos gracias a sus triunfos en las últimas tres carreras que disputó: el Campeonato de Palomas Ace en 2018, la Olimpiada de Palomas en 2019 y la clásica de Angulema en Francia.

Si bien Armando, de cinco años, ya está retirado de la competición, el presidente de PIPA explica que puede seguir teniendo crías hasta por lo menos los 10 años y vivir hasta que tenga 20. Y es su posible descendencia de competidores en futuras carreras lo que resulta tan atractivo para su nuevo dueño.