En un emotivo regreso a la capital francesa, Kim Kardashian se presentó ante el tribunal del Palais de Justice para declarar en el juicio por el impactante robo que sufrió durante la Semana de la Moda en octubre de 2016.
Visiblemente conmovida, la estrella de 44 años relató entre lágrimas cómo fue amordazada, atada y amenazada con un arma por un grupo de ladrones que irrumpieron en su suite privada.
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Los asaltantes le sustrajeron joyas valoradas en más de 10 millones de dólares, incluido su anillo de compromiso, obsequio del rapero Kanye West.
Durante la audiencia, la jueza sorprendió a Kardashian con la lectura de una carta escrita por Aomar Ait Khedache, alias “Omar el Viejo”, uno de los principales acusados, quien expresó su arrepentimiento: “Lamento profundamente lo que causé. Espero que algún día puedas olvidar el trauma”, decía el texto.
Juicio por el asalto a Kim Kardashian
Kardashian respondió entre sollozos: “Aprecio la carta. Te perdono, pero eso no borra el trauma ni el miedo que me acompaña desde esa noche”.
El juicio, que inició el 28 de abril y se extenderá hasta el 23 de mayo, cuenta con diez acusados. Entre ellos figuran Yunice Abbas, autor del libro Secuestré a Kim Kardashian, y Gary Madar, sospechoso de haber filtrado la ubicación de la influencer.
La estrella confesó que desde aquel episodio su vida cambió drásticamente: vive rodeada de seguridad permanente y aún lucha con las secuelas emocionales del hecho. “Recé por mi familia. Pensé que no saldría viva”, recordó ante el tribunal.
El caso sigue captando la atención mundial, mezclando justicia, drama y el inquebrantable foco mediático que rodea a la empresaria.
