Ozzy Osbourne y Black Sabbath se despiden del metal con un concierto inolvidable

Foto: Ozzy Osbourne ofreció su último concierto en vivo/ Cortesía
Foto: Ozzy Osbourne ofreció su último concierto en vivo/ Cortesía

El 5 de julio de 2025 será recordado como un día histórico para los amantes del metal. Ozzy Osbourne, el Príncipe de las Tinieblas, se despidió de los escenarios en su ciudad natal, Birmingham, acompañado de la formación original de Black Sabbath, algo que no ocurría desde hace más de 20 años.

El estadio Villa Park fue el escenario elegido, donde miles de personas se reunieron desde tempranas horas para presenciar este evento sin precedentes. Las puertas se abrieron a las 11:30 de la mañana y, a partir de ahí, desfilaron bandas legendarias y músicos de primer nivel en homenaje a Ozzy.

La jornada comenzó con Mastodon, seguido de Rival Sons y Anthrax, quienes sorprendieron al interpretar el clásico de Black Sabbath Into the Void. Más tarde, Halestorm, Lamb of God y un supergrupo liderado por Tom Morello deleitaron al público con éxitos como Ultimate Sin y Sweet Leaf.

Uno de los momentos más emotivos llegó con un video de Jack Black, acompañado de jóvenes músicos, incluido el hijo de Tom Morello, interpretando Mr. Crowley. Destacó también la participación de Gojira junto a la soprano Marina Viotti, quienes fusionaron metal y ópera interpretando Mea Culpa.

Foto: Ozzy Osbourne ofreció su último concierto en vivo/ Cortesía
Foto: Ozzy Osbourne ofreció su último concierto en vivo/ Cortesía

Gojira, Guns N’ Roses, Mastodon: El adiós de Ozzy Osbourne

La noche siguió con Pantera, que emocionó al público tocando Planet Caravan y clásicos como Cowboys from Hell, mientras Jason Momoa, actor y conductor del evento, se unía al mosh pit. Tool, Slayer y Guns N’ Roses mantuvieron la intensidad, siendo aplaudida la versión de Sabbath Bloody Sabbath por Axl Rose.

Metallica ofreció un tributo especial, vestidos con atuendos inspirados en la cultura mexicana, y cerraron su participación con Master of Puppets y Creeping Death.

Finalmente, Ozzy apareció sentado en un trono negro, interpretando himnos como I Don’t Know, Mama I’m Coming Home y Crazy Train. El broche de oro fue la reunión de Black Sabbath, con Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward, interpretando War Pigs, Iron Man y Paranoid.

El evento recaudó fondos para Cure Parkinson’s y el Hospital Infantil de Birmingham, cerrando con emoción y solidaridad la carrera de una leyenda.

ElImparcial