Kim Kardashian testificará en juicio por el robo que marcó su vida

Foto:Kim Kardashian vuelve al lugar del crimen/Cortesía
Foto:Kim Kardashian vuelve al lugar del crimen/Cortesía

Casi una década después del asalto que sufrió durante la Semana de la Moda, Kim Kardashian regresará a París para testificar de manera presencial en el juicio penal por el millonario robo de joyas ocurrido en 2016.

El proceso judicial, que comenzará el 28 de abril en el Tribunal de Apelación de París, se centrará en uno de los atracos más impactantes cometidos contra una figura pública en Francia en los últimos veinte años.

Así lo confirmó su abogado, Michael Rhodes, en un comunicado difundido este lunes:

“Podemos confirmar que la señora Kardashian testificará de forma presencial en el juicio penal relacionado con el incidente de 2016, en el que fue atada y asaltada a punta de pistola por varios hombres enmascarados”; explicó el defensor legal de la celebridad.

Aunque el juicio dará inicio a finales de abril, la fecha programada para que Kim Kardashian rinda su testimonio ante las autoridades es el 13 de mayo. Se espera que su declaración, basada en los hechos vividos aquella noche, sea clave en el desarrollo del caso.

Foto:Kim Kardashian vuelve al lugar del crimen/Cortesía
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Kim Kardashian vuelve al lugar del crimen

El asalto ha sido objeto de seguimiento tanto por los medios de comunicación como por expertos en seguridad, ya que el modus operandi del grupo delictivo; la vulnerabilidad de una figura de alto perfil como Kardashian marcaron un antes y un después en la percepción de seguridad para las celebridades en eventos internacionales.

Durante la madrugada del 3 de octubre de 2016, Kim Kardashian se encontraba sola en una residencia de lujo alquilada en París cuando al menos cinco hombres encapuchados irrumpieron en el lugar. Algunos de ellos iban disfrazados de policías.

Los delincuentes la amenazaron con armas de fuego, la ataron de pies y manos; y la encerraron en el baño mientras registraban la propiedad. El botín sustraído fue valuado en más de nueve millones de dólares. Entre los objetos robados se encontraba su anillo de compromiso, valorado en cuatro millones de dólares, que le había entregado su entonces esposo; Kanye West.

Kardashian declaró a la policía que uno de los asaltantes hablaba inglés con acento francés y le exigió que entregara el anillo. Mientras tanto, otros vigilaban el acceso principal del edificio y la recepción.

La investigación señaló a una banda de delincuencia organizada, descrita como de estilo “clásico”. Varios integrantes fueron arrestados, aunque parte del botín nunca se recuperó.

El caso generó dudas sobre la seguridad de figuras públicas en eventos internacionales y llevó a muchas celebridades a replantear lo que comparten en redes sociales.

Aunque algunos implicados ya enfrentaron procesos, este juicio busca imponer penas definitivas y cerrar un capítulo que dejó secuelas emocionales en Kardashian, quien se alejó temporalmente de la vida pública.

Además, representa una oportunidad para que la justicia francesa reafirme su lucha contra el crimen organizado.